El documento, que no tiene carácter obligatorio, fue apoyado por un total de 122 países, mientras que 41 estados, entre ellos EEUU, Gran Bretaña, Canadá y Australia, se abstuvieron. No se registraron votos en contra de la propuesta. Según la ONU, alrededor de 1,5 millones de niños menores de cinco años mueren anualmente a causa de enfermedades relacionadas con consumo de agua no potable y malas condiciones sanitarias.
La resolución dice que unos 884 millones de personas en todo el mundo carecen de acceso al agua potable y más de 2,6 millones viven en condiciones sanitarias no adecuadas.
Asimismo, el documento adoptado en la ONU establece que el acceso al agua potable y el saneamiento son derechos fundamentales básicos, claves para vida del hombre.
La resolución llama a la comunidad internacional aunar esfuerzos para garantizar el acceso al agua potable para todos.
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