sábado, 9 de mayo de 2020

Una 'bala' con triple munición antiviral contra la Covid-19

La combinación de tres fármacos frena el coronavirus en pacientes leves y moderados. Esto se traduciría en una mejoría más rápida de los síntomas.

Técnicos de laboratorio cargan viales. Reuters

La búsqueda de soluciones terapéuticas frente al coronavirus de Wuhan no cesan. La última idea: una bala con triple munición, o lo que es lo mismo tres antivirales para eliminar los efectos del virus antes de su avance y conquista el organismo.

En concreto, se trata del uso precoz de una nueva terapia antiviral compuesta por interferón beta-1b, lopinavir-ritonavir (asociación conocida como Kaletra) y ribavirina, junto con las medidas estándar de soporte, es segura y acorta la duración de la propagación viral en el organismo, en comparación con la administración única de lopinavir-ritonavir (en un promedio de siete días de reducción frente a 12 días, respectivamente), en pacientes afectados por la Covid-19 de leve a moderada.

Los datos de este primer ensayo aleatorizado fase II, se publican hoy en The Lancet y ha analizado 127 adultos -a partir de 18 años y con un edad media de 52- con infección por SARS-CoV-2 ingresados en seis hospitales públicos de Hong Kong. 

Estos hallazgos tempranos, pero importantes en la lucha contra esta nueva enfermedad, no incluyen, sin embargo, cuadros severos, por lo que los autores de la investigación, de la Universidad de Hong Kong, en China, subrayan que la necesidad de desarrollar trabajos más amplios en fase III para evaluar la efectividad en críticos.

El director del análisis, Kwok-Yung Yuen, profesor de la Universidad de Hong Kong, explica que se demuestra que el tratamiento temprano de la Covid-19 de leve a moderada con una combinación triple antivirales «puede disminuir rápidamente la cantidad de virus en el organismo del paciente y aliviar los síntomas. 

Una ventaja añadida es que también se reduce el riesgo para los sanitarios, ya que al restar la duración y cantidad de diseminación viral (momento en el que el virus es detectable y potencialmente transmisible), la posibilidad de contagio es menor». Además, señala el director que resulta segura y bien tolerada.

ANTECEDENTES DE ESTA IDEA TERAPÉUTICA

Investigaciones previas encontraron que una combinación de lopinavir-ritonavir oral -asociación normalmente empleada para tratar el VIH- y ribavirina -fármaco oral contra el virus de la hepatitis C (VHC)-, redujo la insuficiencia respiratoria y la muerte en pacientes hospitalizados con síndrome respiratorio agudo severo (SRAS) durante el brote de 2003. 

Se ha demostrado que el interferón beta-1b -con acción antivírica, antiproliferativa e inmunomoduladora- reduce la carga viral y mejora los problemas pulmonares en estudios con animales de la infección por coronavirus del síndrome respiratorio del Medio Oriente (MERS).

No obstante, sobre la asociación de lopinavir y ritonavir, un estudio publicado en The New England Journal of Medicine del pasado marzo sugería que la combinación no aportaba beneficios significativos en la Covid-19. Este hecho unido a sus efectos cardíacos y gastrointestinales graves supuso una disminución de su uso, según observaban expertos consultados por EL MUNDO.

Juan Berenguer, consultor de Enfermedades Infecciosas del Hospital Gregorio Marañón de Madrid, comenta que, a pesar de la originalidad del trabajo al basarse en un tratamiento triple y a que genera hipótesis interesantes, «la realidad es que, en principio, no cambia nada la práctica clínica actual y mantiene ciertas limitaciones. Interesante es también el hecho que el grupo investigador haya resucitado una pauta ya empleada para brotes anteriores del SARS».

Hasta 86 participantes recibieron 14 días de tratamiento con la combinación triple cada 12 horas, junto a más de hasta tres dosis de interferón inyectable beta-1b, en días alternativos, para pacientes ingresados n el hospital menos de siete días desde el inicio de los síntomas. 

El grupo control, 41 pacientes, recibieron lopinavir-ritonavir sólo cada 12 horas. Además, todos recibieron además atención estándar, incluido soporte de ventilación, de diálisis, antibióticos y corticosteroides. El número promedio de días desde el inicio de los síntomas hasta el inicio del tratamiento del estudio fue de cinco días.

RESULTADOS ESPERANZADORES, PERO SE NECESITAN MÁS ENSAYOS

Analizando la evolución de los síntomas y los cambios en los hallazgos de laboratorio, se observó que el tratamiento con la combinación triple de fármacos acabó con la presencia del patógeno (sin virus detectable) en las muestras nasofaríngeas dentro de un promedio de siete días de comenzar el tratamiento, y que fue significativamente más corto que la media de 12 días en el grupo control, tratado solo con lopinavir-ritonavir. 

Los resultados secundarios respaldaron los hallazgos,«lo que indica que la terapia triple redujo a la mitad el tiempo para completar el alivio de los síntomas; un promedio de cuatro días frente a ocho».

Según Jenny Lo, del Hospital Ruttonje de Hong Kong, en China, y coautora del trabajo, «se sugiere que el interferón beta 1-b puede ser un componente clave del tratamiento combinado y merece una mayor investigación para el tratamiento de la Covid-19. Los futuros ensayos de fase III confirmarán o refutarán la utilidad de este fármaco candidato como tratamiento principal para esta enfermedad».

Los autores destacan, sin embargo, varias limitaciones del estudio, en las que coincide Juan Berenguer, incluido que fue un ensayo abierto en el que tanto los investigadores como los pacientes conocían el tratamiento que los participantes estaban recibiendo y no tenían un grupo placebo.


viernes, 8 de mayo de 2020

15 Plantas para Purificar el Aire según la NASA

En 1989 la NASA lanzó una investigación para determinar cuáles son las mejores plantas de interior para purificar el aire. Los científicos descubrieron que el aire en el interior contiene constantemente partículas de compuestos orgánicos nocivos: tricloroetileno, benceno, amoniaco y otros. 

10 Consecuencias de la Contaminación del Aire - Lifeder

Debido a que las plantas de interior tienen la capacidad de neutralizar hasta el 85% de la contaminación del aire en una habitación, los especialistas recomiendan ponerlas en distintas habitaciones para, de tal manera, purificar el aire de forma ecológica.

El aire en el interior contiene cinco elementos nocivos:

Formaldehído. Se encuentra en los muebles de aglomerado, alfombras, materiales de tapicería, humo de tabaco, trastes de plástico, gas. Produce reacciones alérgicas, irritaciones, asma, enfermedades cutáneas.

Tricloroetileno. Se encuentra en los limpiadores para alfombras y telas, agua clorada, cartuchos para impresoras, pinturas y barnices. El tricloroetileno es un fuerte cancerígeno que produce la irritación de ojos y piel, afecta el hígado y los riñones, y provoca agitación psicomotora.

Benceno. Se encuentra en el humo del tabaco, detergentes, incluyendo jabón de tocador, pinturas y barnices, productos de caucho para la limpieza. Es un carcinógeno que es capaz de provocar la leucemia, se acumula en el tejido adiposo

causando excitación, similar a la exitación alcóholica, dificultad para respirar y convulsiones; así como disminuye la presión arterial.

Amoníaco. Se encuentra en las computadoras, el humo de tabaco y agentes industriales para la limpieza. Causa la sensación de gartanta seca, tos, dolores en el pecho, provoca la inflamación de la laringe y los pulmones.

Xileno. Con este elemento se producen muchos tipos de plásticos, pinturas, barnices y pegamentos; también está contenido en los gases de escape vehiculares, productos de cuero y humo de tabaco. Causa irritación en la piel, vías respiratorias y la membrana mucosa del ojo.

15 plantas que no solo adornarán tu casa sino también trabajaran las 24 horas del día en la purificación del aire.

Anthurium andreanum ("Anturio")

© testing/shutterstock.com 

Humedece el aire y lo llena de vapor de agua purificada. Procesa el xileno y el tolueno y los convierte en compuestos seguros para el ogranismo.

Gerbera jamesonii (“Gerbera“, ”Margarita africana")

© memaggiesa/shutterstock.com 

Esta planta de flores coloridas elimina eficientemente del aire tricloroetileno, benceno y formaldehído. Le gusta el calor y el sol.

Scindapsus aureus ("Poto")


Su mayor ventaja es que puede sobrevivir en la sombra. Purifica el aire de forma eficiente del formaldehído y benceno. Es una planta venenosa que hay que mantener lejos de niños y mascotas.

Aglaonema


Este árbol de hoja perenne chino es una planta de interior que crece en condiciones de baja iluminación y le gusta el aire húmedo. Limpia eficientemente el aire de tolueno y benceno. El jugo y las frutas de este árbol son venenosos.

Chlorophytum ("Cintas")


Es una planta con muchas hojas y flores pequeñas de color blanco, combate eficientemente el benceno, formaldehído, monóxido de carbono y xileno. Otro motivo para conseguir esta planta es que es totalmente segura para niños y mascotas.

Hedera helix ("Hiedra común")


Esta planta es una excelente opción para las habitaciones con baja iluminación. 

Elimina de forma eficiente el tricloroetileno, formaldehído, benceno y monóxido de carbono. Se recomienda para suprimir alergenos como el moho.

Azaleas

Esta hermosa planta de flores lucha de forma eficaz en contra del formaldehído que se emite del aglomerado, muebles y alfombras. Sus flores duran bastante tiempo pero requiere riegos regulares.

Sansevieria (“Rabo de tigre“, ”Lengua de suegra")


Es una planta muy resistente, hay que tener mucho talento para echarla a perder. Combate contaminantes como formaldehído, benceno y tricloroetileno. Por la noche, absorbe el dióxido de carbono y libera oxígeno.

Dracaena Marginata ("Drácena Marginata")


Esta planta es apta para eliminar el xileno, tricloroetileno y formaldehído. La dracaena crece lentamente pero sí, llega a crecer alta. Es mejor ubicarla en una habitación con techos altos y luz solar moderada.

Philodendron scandens ("Filodendro trepador")


Elimina del aire el formaldehído y otros compuestos tóxicos. Es una planta muy resistente, se siente bien en habitaciones con escasa iluminación. No se recomienda para aquellos que tienen hijos y mascotas.

Helecho de Boston


El helecho humedece y purifica el aire de las evaporizaciones de formaldehído, monóxido de carbono y xileno. Le gusta el riego abundante y la sombra.

Spathiphyllum (“Cuna de Moisés“, ”Bandera blanca")


"Cuna de Moisés" es la mejor planta para purificar el aire del formaldehído, benceno y tricloroetileno. También combate de forma eficiente el tolueno y xileno. Para su mayor eficiencia se recomienda eliminar el polvo de sus hojas con regularidad.

Palmera de bambú


Esta planta es ideal para filtrar benceno, tricloroetileno y formaldehído. Es recomendable ponerla cerca de los muebles barnizados que emanan compuestos nocivos.

Schefflera arboricola (“Cheflera“, ”árbol paraguas enano")


Purifica el aire de los compuestos del formaldehído, tolueno y benceno. En algunos países la cheflera se llama "árbol paraguas" porque sus hojas, como agujas de paraguas, salen del mismo punto.

Crisantemos


Esta planta no solo te alegrará durante mucho tiempo con sus flores sino también adornará el hogar y combatirá de forma eficiente formaldehído, xileno, benceno y amoníaco.


Basado en material de trueactivist
Imagen de portada Brykaylo Yuriy




miércoles, 6 de mayo de 2020

Cerebro y Corazón Modulan Juntos nuestra Percepción

Imagen de Gerd Altmann en Pixabay

El corazón y el cerebro se comunican constantemente.

Por ejemplo, cuando nos encontramos con una situación peligrosa, las señales del cerebro aseguran que el corazón lata más rápido. Cuando nos relajamos, el corazón se ralentiza.

Aunque sabemos que los latidos del corazón también afectan al cerebro, los mecanismos subyacentes en estos procesos no están claros.

Investigadores del Instituto Max Planck de Ciencias Cognitivas y Cerebrales Humanas (MPI CBS) en Leipzig y de la Escuela de Mente y Cerebro de Berlín, han identificado dos mecanismos que explican cómo el corazón influye en nuestra percepción y en el cerebro.

Primer mecanismo: la sístole habla

El primer mecanismo establece una relación entre la fase del latido del corazón y la experiencia consciente.

En un ritmo regular, el corazón se contrae en la llamada fase sistólica y bombea sangre al cuerpo.

En una segunda fase, la fase diastólica, el corazón se relaja permitiendo que las cámaras cardíacas sean llenadas de nuevo con sangre.

En una investigación anterior del MPI CBS, se estableció que la percepción de los estímulos externos cambia con los latidos del corazón.

Según esta primera investigación, en la sístole tenemos menos probabilidades de detectar un estímulo eléctrico débil en el dedo, en comparación con la diástole.

Cambio cerebral acompasado con el corazón

Ahora, en un nuevo estudio, Esra Al y sus colegas han encontrado la razón de este cambio en la percepción: la actividad cerebral cambia a lo largo del ciclo cardíaco.

En la sístole, un componente específico de la actividad cerebral, que marca la transición a la consciencia, se suprime el llamado componente P300.

El componente P300 es una respuesta cerebral, una onda positiva que se registra unos 300 milisegundos después de la detección de un estímulo, en el marco de una tarea cognitiva.

Al evitar la respuesta P300, la información sensorial entrante no se percibe conscientemente.

El cerebro acepta entonces que los cambios corporales derivados del ritmo cardiaco no ocurren como reacción a un entorno cambiante.

Son solo reacciones al latido del corazón, que se repite regularmente, y por ello no debemos preocuparnos. Por eso no los percibimos normalmente.

Segundo efecto

Al y sus colegas también revelaron un segundo efecto de los latidos del corazón sobre la percepción.

Han comprobado que el ritmo cardiaco condiciona la percepción de los estímulos externos, no solo los que proceden de la actividad del corazón.

El cerebro vigila permanentemente el estado del organismo. Si nota una anomalía, como por ejemplo una subida de la tensión arterial, sacrifica la percepción de estímulos externos para asegurar que el ritmo cardiaco no se altere o se detenga.

En otras palabras, los latidos del corazón pueden ser un indicativo o marcador del estado del organismo: si el cerebro les está prestando una atención especial, nos avisa de que algo no va bien.

Lo notaremos porque, durante esa crisis, la percepción que tenemos del mundo exterior disminuye: nuestro cerebro sacrifica esos estímulos para no distraernos de lo esencial.

Implicaciones

El autor principal, Arno Villringer, explica en un comunicado : «Los nuevos resultados podrían ayudar a explicar por qué los pacientes, después de un accidente cerebrovascular, a menudo sufren problemas cardíacos y por qué los pacientes con enfermedad cardíaca a menudo tienen una función cognitiva deteriorada».

Los investigadores investigaron estas relaciones enviando estímulos eléctricos débiles a los electrodos sujetos a los dedos de los participantes del estudio.

Paralelamente, registraron los procesos cerebrales de cada participante usando un electroencefalograma (EEG) y su actividad cardíaca usando un electrocardiograma (EKG). Los resultados se han publicado en PNAS.


Referencia

Heart–brain interactions shape somatosensory perception and evoked potentials. Esra Al et al. PNAS, April 27, 2020. DOI:https://doi.org/10.1073/pnas.1915629117

https://www.tendencias21.net/Cerebro-y-corazon-modulan-juntos-nuestra-percepcion_a45869.html

domingo, 3 de mayo de 2020

Las Vitaminas son Esenciales en la Lucha contra la COVID-19


Un sistema inmunitario activo es crucial en la lucha contra el coronavirus. El cuerpo necesita suficientes vitaminas y otros nutrientes para poder responder al ataque. No obstante, muchos tienen carencias vitamínicas.

Usar máscaras, mantener la distancia, lavarse las manos: mandamientos que actualmente se aplican en todo el mundo. Aparte de esto no podemos hacer nada más que esperar a que se encuentre un medicamento eficaz contra el coronavirus o se desarrolle una vacuna. ¿Verdad? No del todo.

Hay algo más que ahora toma mayor relevancia y que debería desempeñar un papel no menos importante que una buena higiene de manos; algo que no encuentra un lugar destacado ni en el debate público ni en el catálogo de recomendaciones de los Gobiernos: un sistema inmunitario activo.

El bioquímico Adrian Gombart, quien investiga en el Instituto Linus Pauling de la Universidad Estatal de Oregón sobre la relevancia de los nutrientes para el sistema inmunitario, desea cambiar este hecho. 

Junto con sus colegas, comenzó a crear un documento de revisión que resume los resultados de los estudios sobre diversos nutrientes y su impacto en el sistema inmunitario humano. Hallazgos que pueden ser un arma adicional en la lucha contra el nuevo coronavirus.

Nada funciona sin vitaminas

"Las medidas tomadas son importantes. Pero también es importante que prestemos atención a nuestro estado nutricional para que nuestro sistema inmunitario pueda funcionar", dice Gombart. La vitamina C y D u otros micronutrientes como el zinc, el hierro y el selenio son mucho más que nutrientes "agradables de tener". 

En el peor de los casos, la falta de nutrientes puede abrir la puerta al virus, porque el cuerpo no puede defenderse de los intrusos. Para las personas que ya pertenecen a un grupo de riesgo, el peligro en la actual situación es particularmente alto.

Esto se basa en una bioquímica simple: "Cada célula de nuestro cuerpo utiliza diferentes micronutrientes para funcionar", dice Gombart. Los micronutrientes incluyen vitaminas, minerales y ácidos grasos omega.

A diferencia de los macronutrientes como las grasas, los carbohidratos y las proteínas, los micronutrientes no proporcionan energía al cuerpo. Sin embargo, son esenciales para las funciones básicas de un organismo. No solo para el metabolismo celular, sino también para el sistema inmunitario.

Mantener las líneas de defensa

Adrian Gombart está investigando principalmente la vitamina D. "Hace unos años, nuestro grupo de investigación descubrió que la vitamina D regula la expresión de un gen que codifica un péptido antimicrobiano", dice. 

Dichos péptidos están involucrados en los mecanismos de defensa inespecíficos de nuestro cuerpo. "La vitamina D también está involucrada en la regulación de otros genes inmuno-relevantes". Por el contrario, la falta de vitamina D puede crear una brecha en las defensas de nuestro cuerpo; los intrusos tendrían mayor facilidad.

Los gérmenes penetrantes primero deben pasar a través de la piel y las membranas mucosas. Una vez que han superado esta primera línea de defensa, el cuerpo reacciona a los invasores con fagocitos, proteínas antimicrobianas e inflamación. Estos procesos son parte de los mecanismos de defensa no específicos. Si esta defensa no funciona, el cuerpo tiene que ser más preciso.

El SARS-CoV-2 solo puede combatirse mediante una respuesta inmune muy específica. Los linfocitos detectan microorganismos extraños y moléculas extrañas; los virus son uno de ellos. Los linfocitos pueden producir anticuerpos y atacar a un francotirador en la batalla.

Vitamina C contra patógenos

Estos procesos solo pueden tener lugar correctamente si el cuerpo está bien equipado. Con vitamina C, por ejemplo. "La vitamina C es necesaria, entre otras cosas, para la formación de especies reactivas de oxígeno, también llamadas radicales de oxígeno. Estos radicales son otra arma del cuerpo en la lucha contra los patógenos".

La vitamina C también participa en la producción de anticuerpos, sin los cuales el cuerpo no puede mantener a raya la COVID-19. Es por esto que los pacientes enfermos por el nuevo virus y que están en cuidados intensivos son tratados con altas dosis de vitamina C, dice Isabelle Schiffer.

Comentario: Más sobre la vitamina C:


Schiffer es un genetista e investigadora geriátrica y la portavoz científica de la fundación "forever healthy". Más allá de la pandemia, Schiffer y sus colegas están preocupados por la cuestión de cómo las personas pueden crecer lo más saludablemente posible. Sus recomendaciones se basan en los hallazgos de varios sectores científicos.

Naturopatía considerada como ciencia

Este enfoque holístico también incluye la naturopatía. Con el fin de "hacer una contribución" en esta época de pandemia, como dice Schiffer, el equipo de "forever healthy" buscó plantas medicinales, cuya efectividad se ha confirmado en estudios clínicos.

 "Descubrimos que hay muy poco conocimiento sobre las sustancias a base de hierbas que pueden ayudar a aliviar los síntomas o aliviar el curso de una infección", dice Schiffer. Es importante que el científico enfatice que la naturopatía no puede reemplazar a la medicina convencional, sino que puede complementarla.

"Muchas personas que escuchan el término 'naturopatía' tienen de inmediato la imagen del sanador milagroso que quiere curar el cáncer en su cabeza. Por supuesto, eso no es lo que la naturopatía puede hacer", dice Schiffer. Se trata mucho más de fortalecer el sistema inmunitario.

Entre los ingredientes botánicos que Schiffer y sus colegas identificaron como potencialmente útiles en la lucha contra la COVID-19 se incluyen el saúco. "Los estudios clínicos han demostrado que el extracto de saúco reduce la probabilidad de un resfriado y la duración de los problemas respiratorios asociados con la gripe "dice Schiffer.

¿Comida o suplemento?

El efecto positivo de la baya del saúco no es ninguna farsa, sino pura bioquímica: contiene numerosas vitaminas y oligoelementos. Tanto Isabelle Schiffer como Adrian Gombart opinan que actualmente es aconsejable aumentar la dosis de vitaminas y otros micronutrientes con la ayuda de suplementos. La mayoría de ellos carece de vitamina D en particular.

El Instituto Federal de Evaluación de Riesgos (BfR) opina diferente: "Básicamente, una dieta equilibrada y variada proporciona al cuerpo sano todas las sustancias necesarias para la vida", dice un comunicado. Sin embargo, el instituto admite que hay excepciones a esta regla.

La necesidad de nutrientes aumenta durante el embarazo y la lactancia. Las personas mayores también tienen más probabilidades de ser desatendidas. Una dieta saludable no debe ser una cuestión de estilo de vida, sino una medida para prevenir enfermedades. Como lavarte bien las manos.


Julia Vergin
jue, 30 abr 2020 08:42 UTC