En la India aumenta la cantidad de víctimas que desconocen los experimentos ilegales con medicamentos de las compañías extranjeras, que tratan a los indios como 'animales de laboratorio'.
Las pruebas con medicamentos de las empresas farmacéuticas internacionales causan daño a la salud de la gente y provocan muertos.
Así, este país se ha convertido en la meca de los experimentos médicos ilegales. Por desgracia, entre las víctimas inocentes de las pruebas criminales hay muchos niños.
Los pacientes de estos experimentadores que reciben nuevos medicamentos según les prometieron los médicos están muy contentos porque el tratamiento es gratis. Sin embargo, muchos pacientes que habían recibido la asistencia de acuerdo con el programa estatal descubrieron que la mafia farmacéutica los utiliza como conejillos de indias.
Una de las víctimas de las pruebas ilegales con medicamentos, Vinod, relató que hace seis meses tomó unas pastillas por consejo de su médico. "Sentía dolor en mi abdomen. Me han hecho pasar por todo tipo de exámenes y tomar varias pastillas por las mañanas, pero no me siento mejor. No soy sapo ni rata o gato para que me puedan utilizar en ensayos de medicamentos", explica Vinod.
El doctor Anand Rai, presidente de la Asociación de Médicos Residentes del Estado de Madhya Pradesh, cree que muchos pacientes firman los papeles sin entender las propiedades de los medicamentos administrados y las consecuencias que pueden ocasionar.
"Los norteamericanos tratan a los indios como si fueran animales de laboratorio. Los pacientes involucrados en los estudios son analfabetos y pobres. Ni siquiera tienen los datos necesarios sobre las medicinas ni se dan cuenta de que participan en un experimento. Es inmoral e ilegal utilizar a los pacientes para ensayos médicos sin su consentimiento", dijo.
El doctor Rai explica que en la India los ensayos se vuelven cada vez más populares porque cuestan seis veces menos que en Occidente. A pesar de que la industria de pruebas médicas en la India ha experimentado un rápido crecimiento, el sistema de regulación es bastante corrupto en este país y las empresas farmacéuticas pueden fácilmente registrar pacientes y realizar pruebas.
"En los países desarrollados se necesitarían seis meses para registrar cinco pacientes. Pero en la India durante el mismo periodo se pueden realizar investigaciones con 2.000 participantes", señala Rai.
Prestar toda la información sobre la prueba al participante y recibir su consentimiento es la regla de oro en todo el mundo, mientras que en la India muchos pacientes ni siquiera son conscientes de que son parte de un experimento.
Actualmente, la policía está investigando muchos casos, aunque en los hospitales afirman que "todos los ensayos se organizan de acuerdo con las normativas estatales".
Mientras tanto, unas leyes más perfectas parecen ser el único remedio para proteger a los pobres de los posibles efectos de los experimentos irresponsables.
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