En estas fechas es frecuente que se nos advierta de la importancia de proteger correctamente nuestra piel para evitar quemaduras solares y otras consecuencias graves como el melanoma. Sin embargo, también debemos insistir en la protección del cabello que como la piel sufre los efectos del verano, sobre todo por la acción del sol, el cloro, la sal y la arena.
Una adecuada hidratación mejora el estado de nuestro cabello en verano.Aquí tenéis algunos consejos para mantener el pelo fuerte y brillante durante todo el año más allá de usar mascarilla, champú y otros tratamientos nutritivos.
Marta Moreno, de Farmacia Provença 156 y experta en Dermocosmética, nos cuenta que “el cabello se vuelve más seco y quebradizo durante el verano. Las puntas se abren y se reduce su brillo. Por eso, es importante mantenerlo protegido y cuidado, igual que la piel, y si ya está dañado repararlo cuanto antes”.
Antes y después de cada exposición solar
En las farmacias ya se pueden encontrar productos específicos para el cuidado del cabello como sprays protectores, champús con filtro solar y mascarillas nutritivas. Estos serán nuestros aliados en la hidratación y nutrición de nuestra melena durante esta época. Además, podemos encontrarlos tanto para adultos como para los más pequeños, que requieren una protección aún mayor.
- Hay que aplicar los protectores por todo el cabello antes de cada exposición solar y renovarlos después de cada baño. “Para mayor seguridad, podemos utilizar también complementos como sombreros, pañuelos o turbantes”, explica Moreno.
- Después del sol y el agua, hay que aclarar el pelo con agua tibia o fría para quitar los restos de sal y arena.
- Después del lavabo hay que aplicar mascarillas hidratantes o reparadoras. Existen algunas específicas after-sun que pueden ayudarnos en nuestro propósito.
Estos consejos son especialmente importantes para las personas con piel y cuero cabelludo sensibles o con el pelo teñido, ya que el tinte reseca mucho el cabello.
Otras recomendaciones
Asimismo, Moreno afirma que “no hay duda de que la alimentación influye notablemente en nuestro cuerpo afectando a la salud de nuestro cabello”. Por ello, es recomendable la ingesta de alimentos con alto contenido en hierro, potasio, omega 3, azufre y ácido fólico para mantener el brillo y la fuerza del pelo. En este sentido, actúan beneficiosamente los pescados, las nueces, las verduras, la fruta, las legumbres o los cereales.
“En ocasiones nos han consultado en la farmacia sobre el uso de aguacate, aceite de oliva o claras de huevo en el lavabo del pelo. Aunque es cierto que existen remedios caseros basados en estos alimentos, recomendamos no usarlos porque en casa es difícil saber exactamente la cantidad y periodicidad que debemos seguir”, añade Moreno.
Por Monica De Haro
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