Quitar las arrugas del rostro puede ser una tarea muy difícil, sobre todo si se emplean remedios naturales; sin embargo, es posible preparar diferentes cremas con ingredientes totalmente naturales.
Te daremos la receta de dos preparados, la crema de zanahorias y la mascarilla de tomate, para que elijas el que más te agrade. No dejes de leerlo.
Crema de zanahorias
Para hacer esta crema de zanahorias para combatir las arrugas necesitarás 3 cucharaditas de agua, 3 cucharaditas de jugo de aloe vera, media cucharadita de aceite de zanahoria –el cual puedes mezclar con aceite de girasol para darle un bonito tono amarillo–, 1 cucharada de cera de abejas para emulsionar, 3 pequeñas cucharadas de aceite de semillas de camelia y 2 cucharadas de manteca de karité para darle textura cremosa. Opcionalmente, puedes añadir 2 gotas de aceite esencial de zanahoria, 5 gotas de aceite esencial de lavanda, 3 gotas de aceite esencial de geranio rosa o 3 gotas de aceite esencial de incienso.
Para prepararla, combina todos los aceites con la manteca de karité y la cera de abejas y lleva toda la mezcla al fuego lento a baño maría, hasta que se derrita. Deja enfriar, y cuando tome la temperatura ambiente, añádele el jugo de aloe vera y mezcla bien hasta obtener una crema homogénea. Enseguida, agrega el aceite esencial que desees (yo te aconsejo el aceite esencial de zanahorias). Una vez que la preparación tomó la consistencia deseada, vierte todo en un frasco de vidrio, úsalo dentro de los dos meses como cualquier crema antiarrugas y pasado ese tiempo deséchalo. Ten presente que es preferible no utilizar solo el aceite de zanahoria, sino que es mejor mezclarlo con el de girasol como está explicado, pues de lo contrario puede dejarte la piel anaranjada.
Mascarilla de tomate
El tomate también puede ser utilizado para eliminar las arrugas del rostro. Esto se debe a las propiedades antioxidantes que le brinda el licopeno. Para prepararla, necesitarás un tomate mediano y una cucharada de azúcar granulado fino.
Cuando tengas los ingredientes, corta la parte superior del tomate, y en un plato pequeño pon el azúcar. Sumerge la rodaja de tomate allí. Pásala por tu rostro con movimientos circulares, sobre todo en las áreas donde se encuentran las arrugas y también los puntos negros, pues los elimina fácilmente. Una vez que ya cubriste todo tu rostro, deja que lamascarilla de tomate descanse unos 10 minutos sobre tu rostro. Finalmente, enjuaga con agua tibia y seca tu cara con suaves golpecitos con la toalla. Verás que obtendrás, con el paso de los días, una piel fresca, joven y elástica.
Como verás la crema de zanahoria y la mascarilla de tomate son muy efectivas para eliminar los rastros de arrugas. ¿Cuál prefieres tú?
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