La crisis hipertensivas se pueden definir como la elevación aguda de la presión arterial y esto generar alteraciones estructurales o funcionales en el cuerpo.
Las crisis hipertensivas a veces generan síntomas y otras veces no. En estos episodios la presión diastólica (baja) es mayor a 110 mm de Hg.
Las crisis hipertensivas pueden poner en riesgo la vida de la persona que no tenían antecedentes anteriores o ya eran hipertensas.
En general los hombres son más propensos a padecer crisis hipertensivas que las mujeres.
Se puede clasificar en 2 las crisis hipertensivas:
-La crisis hipertensiva urgente se produce cuando la presión es muy alta pero no hay daño en los órganos.
Los síntomas de este tipo de crisis hipertensiva son:
-falta de aliento
-ansiedad
-dolor de pecho
-dolor de cabeza
-problemas para respirar
-hemorragia de la nariz
-dolor de espalda
-problemas en la visión
Este tipo de crisis de presión no suele requerir de la internación del paciente sino que se ajusta la medicación o se la cambia para equilibrarla.
Pero la crisis hipertensiva de emergencia si es grave y puede poner en riesgo la vida de quien la padece.
Las consecuencias de la elevación de la presión en forma abrupta genera daños en el cuerpo como:
-infarto
-angina de pecho
-derrame cerebral
-dañar la vista o los riñones
-edema pulmonar
-eclampsia en las embarazadas
Es vital controlarse la presión arterial regularmente aunque no se sea hipertenso para saber cómo se tiene la presión.
Y en caso de tener algunos de los síntomas descriptos anteriormente se debe acudir al médico para evitar consecuencias graves en la salud.
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