Pasamos muchas horas soportando el peso de nuestro cuerpo con nuestros pies y el tipo de calzado que llevamos influye mucho en la postura que adoptamos.
Para caminar de manera correcta, lleva los hombros atrás y contrae el abdomen.
Si la postura es incorrecta, esto acaba afectándonos de muchas formas y provocando dolor de espalda, piernas, pies...
Es aquí donde entra en juego el calzado fisiológico, que gracias a su tecnología, contribuye a activar la musculatura, mejorar la postura y reducir el dolor lumbar.
En 1996, Karl Müller lanzó al mercado su primera creación: el zapato MBT. Un calzado lifestyle especialmente diseñado para cuidar la salud mientras se camina o simplemente se permanece de pie.
Los beneficios de MBT, firma pionera en este tipo de calzado, están corroborados por más de 40 estudios científicos independientes.
La clave del éxito es que se trata de una herramienta pro-cuerpo que favorece la corrección de la postura corporal, por lo que activa grupos musculares que rara vez se utilizan con un calzado convencional.
Los materiales utilizados, el diseño y su composición, hacen que se recupere y mejore la condición natural de caminar. Aunque al principio cuesta y resulta inestable; parece que te vas a caer al generar un movimiento de balanceo.
La gran diferencia es que las suelas de este tipo de calzado absorben los impactos, para que no sufran las articulaciones o la espalda.
Por eso, llevar este tipo de calzado puede ayudar a mejorar el equilibrio el retorno venoso, reducir el dolor lumbar y aumentar la actividad muscular.
Además, al caminar con el cuerpo más erguido se aumenta el ritmo circulatorio y hasta respiramos mejor. Es como si estuvieras haciendo ejercicio o recibiendo un masaje revitalizante.
También reducen la presión en el tobillo y el talón, así que son beneficiosos si tienes fascitis plantar, tendinitis, artrosis o espolón calcaneo.
El calzado fisiológico permite caminar de forma confortable y saludable.
Aunque se han observado beneficios concretos en personas con patologías como espolón calcáneo, dorsalgias, problemas en las articulaciones, obesidad; el uso de calzado fisiológico debería ser consultado con un especialista.
[Relacionado: Pies: la parte del cuerpo que lo sabe todo sobre tu salud]
En cuanto a si valen o no para adelgazar, sentimos ser tan categóricos, pero la respuesta es no. Y ahora, maticemos.
Este tipo de calzado hace trabajar músculos que normalmente no trabajan. Al usarlos de pronto se vuelve a disfrutar del placer de caminar. Sólo con ello se consigue un mayor consumo de calorías.
Pero que quede claro, el adelgazar o engordar es simplemente una diferencia entre calorías adquiridas y calorías gastadas.
Además de los MTB, hay otras firmas interesantes que deberías conocer si te estás planteando probar este tipo de calzado como Joya, FitFlop, Mephisto Sano, Stretch Walker de Xsensible o Chung Shi.
Por Monica De Haro |15 abr 2015 12:51 CEST
https://es.tendencias.yahoo.com/blogs/salud-y-bienestar/el--milagro--del-calzado-fisiol%C3%B3gico--m%C3%A1s-salud--menos-kilos-105132940.html
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