Aunque las celebrities como Kim kardashian, Sofía Vergara y JLo vivan de ello y se pasen el día presumiendo de curvas, la realidad es otra. Muchas mujeres viven acomplejadas por su cuerpo, en especial, las que tienen un trasero grande y voluptuoso.
Tener un trasero prominente es síntoma de buena salud.
Más aún en esta época previa a las vacaciones estivales en la que nos bombardean con anuncios de cuerpos perfectos y mensajes subliminales bastante polémicos.
Como, por ejemplo, éste de unas pastillas para adelgazar en el que aparece una chica en bikini bajo la pregunta: "¿Preparada para enseñar tu cuerpo de playa?" ("Are you beach body ready?").
La polémica que ha generado está dando mucho que hablar, y nosotros tenemos algo que decir porque resulta que adelgazar no siempre puede ser recomendable.
De hecho, tener grasa corporal es un seguro de salud para las mujeres. En concreto, podría ser beneficioso para el buen estado de tu corazón.
Una investigación publicada en el International Journal of Obesity ha demostrado que la grasa acumulada en el trasero puede evitar el endurecimiento de las arterias, y en consecuencia, prevenir la aparición de poblemas del corazón.
Las conclusiones también hallaron indicios de que tener grasa localizada en esta parte del cuerpo femenino podría reducir el riesgo de padecer otras enfermedades graves como la diabetes.
Según los científicos, de la Universidad de Oxford, "tener unos kilos de más en la zona de las caderas, los muslos o el trasero es bueno para la salud".
En estas zonas se acumula un tipo de grasa que elimina los ácidos lípidos dañinos y contiene agentes anti-inflamatorios, evitando que se obstruyan las arterias.
Al contrario de lo que sucede con la grasa que se instala en cintura, abdomen y flancos, la acumulación de grasa en los glúteos ayuda a reducir los niveles del colesterol malo (LDL) y eleva los niveles de colesterol bueno(HDL).
Al empeñarte en adelgazar estás reduciendo esa 'capacidad protectora' de la grasa y esto prodría desembocar en patologías cardíacas y metabólicas.
Por suerte, es muy difícil eliminar la grasa de las caderas o el trasero. Está ahí porque tiene la función de proteger las arterias y promover el control de azúcar en la sangre.
Así que, aunque sólo sea por tu salud, ¡acepta tu cuerpo! Deja de declararle la guerra a las cartucheras, los muslos o el culo.
Recuerda, es mucho mejor eso que tener una barriga enorme. Si algo debería preocuparte son los flotadores en la cintura, no el resto.
Por Monica De Haro |
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