martes, 6 de marzo de 2018

Aromatiza tu casa de forma sencilla y económica

Para que los aromatizantes caseros sean efectivos es conveniente que los renovemos semanalmente, o según notemos que se desvanece el olor que desprenden

Además de conservar una casa limpia y organizada, también es importante que se mantenga con un olor agradable. De esta manera podrás hacerla más cómoda para ti, tu familia y los visitantes.

Igualmente, si llenas de deliciosos aromas tus espacios cerrados y zonas comunes como la cocina, los baños y los cuartos será más sencillo evadir los malos olores que normalmente se generan.

A continuación, te daremos una lista de aromatizantes naturales, económicos y sencillos, con los cuales no tendrás excusa para no mantener tu hogar con un confortable olor.




Ambientador de clavos y naranja

Este es uno de los aromatizantes más comunes y efectivos que puedes utilizar.

El cítrico de la naranja junto al fuerte olor del clavo impregnarán el ambiente de un olor acogedor, dulce y fresco. Asimismo, los clavos ayudarán a que la naranja se conserve por más tiempo.
¿Cómo hacerlo?

Únicamente necesitas una naranja con su cáscara y un puñado de clavos de olor (entre más clavos más fuerte será el olor).
Introduce los clavos en la cáscara de la naranja (es preferible que escojas una naranja suave para que los clavos traspasen con facilidad).
Para que el ambientador también sea parte de la decoración puedes jugar con formas o añadir detalles como listones en la fruta, o pequeñas piedras o pétalos de rosa alrededor.
Colócalo como centro de mesa, en la cocina o colgado en el armario para evitar los malos olores.

Aromatizante de lavanda

Además de tener un buen aroma, la lavanda ha sido utilizada para recuperar el sueño y la tranquilidad.

Combate contra el insomnio, el dolor de cabeza, la depresión y el estrés.

Si presentas algunos de estos inconvenientes este aromatizante es más que indicado para ti.
Ingredientes

1 cucharada de bicarbonato de sodio (10 g)
5 flores de lavanda
Agua (la necesaria)
Utensilios
1 frasco con tapa metálica
¿Cómo hacerlo?
Coloca las flores de lavanda en el frasco.
Añade el agua hasta que haya cubierto las flores.
Agrega la cucharada de bicarbonato de sodio y revuelve.
Con la ayuda de una puntilla o algún elemento puntiagudo, haz agujeros en la tapa metalizada.

Coloca en la mesilla de noche y listo: disfruta de los beneficios de está bondadosa planta a la vez que decoras tu cuarto.

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