12/06/2019
Las flores de Bach, conocidas y utilizadas en casi todo el mundo como remedios efectivos e inocuos, constituyen un sistema de tratamiento natural, basado en elixires florales, que se emplea para armonizar de manera holística (integral) los desequilibrios físicos, emocionales, mentales y espirituales de todos los seres vivos (sean humanos, animales o vegetales).
El uso de flores con fines curativos es mencionado ya en antiguos escritos de China, de filósofos occidentales como Sócrates o Platón, del médico suizo del siglo XV Paracelso o en la tradición de los aborígenes australianos.
Sin embargo, el descubrimiento de los elixires y su acción terapéutica tal y como hoy la conocemos, se atribuye al médico británico, Edward Bach, quien en los años 30 del siglo pasado desarrolló y difundió este sistema de curación y pasó a ser conocido como padre de la terapia floral.
La acción de las flores de Bach no se basa en el principio activo fitoterapéutico de la flor o de la planta, sino en la información energético-vibracional. Lo novedoso del método de Bach fue que en lugar de coger extractos de flores para hacer diluciones como en homeopatía, Bach estudió cómo la luz del sol de la mañana atravesaba las gotas de rocío que quedaban en las flores, y transfería a estas gotas de agua, la capacidad de sanar de esas plantas.
Colocó las flores en un frasco de cristal lleno de agua mineral de manantial, y las dejó al sol algunas horas, para que los rayos de sol le transmitieran la energía de las flores al agua.
Como las demás terapias naturales, en España actualmente no está reconocida ni regulada, sin embargo está integrada en los sistemas de salud de otros países de Europa y del resto del mundo. En España, las flores de Bach se pueden comprar sin problema, en herbolarios y farmacias.
Entre los países con mayor desarrollo en el empleo de la terapia floral desde hace años figuran, entre otros, Alemania, Inglaterra, Australia, también España, Estados Unidos, Francia, Nueva Zelanda, Sudáfrica, Suiza…. A raíz de las flores de Bach se desarrollaron también otras terapias florales diferentes, basadas en lo mismo pero con las flores de las distintas zonas como la de California, las esencias florales Bush de Australia, la de flores del Mediterráneo…
El creador de los 38 remedios florales que componen el sistema de Flores de Bach fue un hombre de ciencia: el médico Edward Bach (1886-1936)
Cuba incluye desde 1999 el tratamiento floral en las clínicas de medicina natural de los servicios de salud pública. Allí, es empleado por médicos, psicólogos, farmacéuticos, estomatólogos y enfermeras, en tratamientos de hipertensión arterial, enuresis del niño (micción involuntaria nocturna), asma bronquial, síndromes depresivos, adicciones, dolores reumáticos y articulares, entre otros.
Aunque la comprensión de cómo actúan sea difícil, la explicación científica de su funcionamiento empieza a ser corroborada por investigaciones, como la del premio Nobel de Medicina, Luc Montagnier, que dice “no solo yo, sino otros muchos investigadores han demostrado que el agua líquida tiene estructuras que pueden contener y guardar moléculas biológicas”.
Además, no hay que olvidar que el creador de los 38 remedios florales que componen el sistema de Flores de Bach, fue un hombre de ciencia: el médico Edward Bach (1886-1936), cirujano jefe de traumatología y especializado luego en bacteriología e inmunología.
Trabajó durante años en el Hospital del Colegio Universitario de Londres, en el que investigando sobre las bacterias intestinales y las enfermedades crónicas, llegó a preparar 7 cepas bacterianas como vacunas.
Trabajó durante años en el Hospital del Colegio Universitario de Londres, en el que investigando sobre las bacterias intestinales y las enfermedades crónicas, llegó a preparar 7 cepas bacterianas como vacunas.
Pero siguió investigando porque lo que pensaba es que la forma de tratar a los enfermos no debía ser agresiva, ni tener efectos secundarios y, lo más importante, debía ocuparse del enfermo y no de la patología. Y es que detrás del sistema de Flores de Bach, hay toda una concepción del mundo, del ser humano y de la enfermedad, que Bach recoge en sus escritos y que resulta imprescindible leer para comprender mejor cómo desarrolla este sistema.
Su objetivo era la búsqueda de “un remedio adecuado, de naturaleza simple y no intrusivo, destinado a la prevención y cura de las enfermedades crónicas”. Bach quería crear un sistema sencillo y universal que pudiera ser utilizado por todo el mundo.
En su texto “Cúrense a ustedes mismos”, dice Bach que “la razón principal del fracaso de la ciencia médica moderna reside en que trata los síntomas y no las causas”. Para él “la enfermedad no es material en su origen” “es, en esencia, un conflicto entre el Alma y la Personalidad”.
Detrás del sistema de Flores de Bach, hay toda una concepción del mundo, del ser humano y de la enfermedad
Además de trastornos como la depresión, el estrés, la ansiedad, la dificultad de concentración….las Flores de Bach ayudan a corregir patrones mentales y emocionales como la culpa, la rabia, los celos, la impaciencia, los diferentes tipos de miedos, la falta de confianza en uno mismo, el pesimismo, la rigidez mental, la intolerancia, etc.
Pero más allá de la toma sintomática de flores (por ejemplo para miedos paralizantes “Rock Rose”, o miedos cotidianos y reconocidos “Mimulus”, para los que no pueden soportar la carga de la vida “Hornbeam”, para los que se culpan “Pine”, o la conocida fórmula “Remedio Rescate” que reúne un conjunto de flores que se emplean para situaciones de emergencia, accidentes, noticias traumáticas, etc.), lo verdaderamente sanador de este sistema creado por el doctor Bach, es la posibilidad de adquirir mayor conciencia y comprensión del origen del problema, para así poder cambiar las pautas emocionales, mentales o de conducta que nos han llevado a ese estado negativo.
De ahí que la terapia de Flores de Bach, dentro de su sencillez e inocuidad, es ante todo una gran vía de autoconocimiento.
Más información en: “Bach por Bach. Obras completas”, www.floresbach.com, “Tipologías y Flores de Bach” de Luis Jimenez.
Autora: Marta Gandarillas, Periodista especializada en Salud Natural
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