Según un estudio realizado por los investigadores del Centro Médico de la Universidad de Maastricht durante más de diez años y publicado en la revista de Endocrinología "Trends in Endocrinology & Metabolism", la exposición frecuente a un frío moderado puede ayudar a nuestro organismo a potenciar el gasto de energía y, por lo tanto, a bajar de peso.
El frío moderado puede provocar un mayor gasto de energía, y por tanto, reducir calorías. (Foto: Fotolia)
Con el objetivo de saber si los ambientes cálidos y confortables del hogar o de las oficinas podían tener algo que ver con la obesidad, los expertos estudiaron las reacciones y los cambios corporales enun grupo de voluntarios que permaneció seis horas al día a una temperatura de 15 grados durante diez días.
Tras este proceso, los resultados mostraron un aumento del porcentaje de grasa parda o marrón, muy beneficiosa a la hora de quemar energía para mantener la temperatura corporal adecuada. Y es que según aseguran los expertos, los participantes terminaron por acostumbrarse al frío y entirse más cómodos a menos grados.
A la vista de estos datos los autores también concluyen que la maquinaria que pone en marcha el organismo para contrarrestar el frío y no tiritar puede suponer desde un pequeño gasto de energía hasta un 30 por ciento del presupuesto de energía del cuerpo. Por lo que, además de comer adecuadamente y practicar ejercicio, recomiendan acostumbrarse a pasar más tiempo a una temperatura moderadamente baja.
En concreto, una temperatura a 17-15 grados favorece la producción de grasa parda. "Así estaríamos más protegidos de la obesidad y seríamos menos vulnerables a los cambios repentinos de la temperatura ambiente", explica unas de las responsables de la investigación, Marken Lichtenbelt.
"La mayoría de nosotros estamos expuestos a las condiciones del interior de nuestra casa, pero vale la pesa explorar lugares con temperatura ambiente", añade a la vez que plantea una interesante pregunta:
"¿Qué pasaría si dejamos que nuestros cuerpos funcionen de nuevo para controlar la temperatura corporal? Esta nueva hipótesis sugiere que el ambiente térmico afecta a nuestra salud y que la exposición frecuente al frío puede ayudar a mejorar el gasto de energía durante períodos sostenidos", concluye.
Por Monica De Haro
http://es.tendencias.yahoo.com/blogs/salud-y-bienestar/bajar-la-calefaccion-unos-3c-ayuda-para-perder-121652138.html
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