Una de las molestias más comunes son los problemas circulatorios que se deben a varios factores. Veamos qué régimen se adapta mejor, ayudando a seleccionar algunos alimentos y conociendo aquellos que deben dejarse de lado.
FUSE/THINKSTOCK
Factores que pueden influir en una mala circulación de la sangre
Predisposición genética: existe un componente genético, en particular relacionado con la coagulación de la sangre, como la enfermedad de la trombosis venosa profunda.
Malos hábitos alimenticios: la alimentación con un porcentaje alto de grasa saturada y glúcidos simples ayuda a aumentar los niveles del colesterol malo y de triglicéridos en la sangre.
Tasa alta de colesterol y de triglicéridos que ayuda a la formación de ateroma, resultando en las arterias obstruidas, y que impide una buena circulación y la oxigenación de la sangre y de los tejidos, lo que conlleva en ciertos casos a la muerte.
Modo de vida sedentario: la falta de actividad física suele estar en el origen de estas enfermedades.
El estrés, el nerviosismo, la ansiedad, una vida complicada en el mundo en el que vivimos hace que la salud se vea normalmente amenazada.
El tabaco: el tabaquismo aumenta no sólo el porcentaje de problemas circulatorios, sino que también puede agravar la situación añadiendo problemas respiratorios.
Alimentación y circulación sanguínea
Los alimentos tienen un poder medicinal, ayudan a tratar las enfermedades, como en el caso de la alimentación para una mala circulación.
En este caso en particular, veamos pues los problemas de circulación debidos a niveles excesivos de colesterol LDL y de triglicéridos. El régimen alimenticio para los problemas de circulación sanguínea estará basado en una selección de alimentos específicos.
HOWARD SHOOTER/THINKSTOCK
Alimentos adecuados
Alimentos sin materias grasas: leche, queso para untar con un débil porcentaje de grasa son ideales, carne (preferentemente pescado, pollo sin piel, ternera sin materia grasa).
Los alimentos ricos en fibras: las fibras tienen la posibilidad de eliminar el exceso de colesterol y de triglicéridos en el cuerpo, para esto es esencial consumir: frutas, verduras (preferentemente crudas), cereales integrales (arroz, avena, salvado de trigo), legumbres (lentejas, garbanzos, judías).
Los huevos: los huevos pueden consumirse todos los días si así se desea.
Bebidas: El agua es la más recomendada, otras pueden igualmente ser bebidas gaseosas de dieta, zumo de frutas frescas sin azúcar añadido. Evitar las bebidas alcohólicas. Si se es hombre se puede beber hasta dos vasos de vino tinto, si se es mujer, un solo vaso de vino.
Infusiones de diferentes hierbas que tienen virtudes que mejoran la circulación sanguínea, como el té rojo, el té verde, el romero, etc.
Condimentos: Sólo aceite de oliva, aceite de soja, aceite de girasol o aceite de maíz para aromatizar las ensaladas, etc. No utilizar aceite para freír.
Edulcorantes: En este caso, se aconseja utilizar edulcorantes artificiales, como el ciclamato de sodio, la sacarina, etc.
Alimentos prohibidos
Snacks.
Mayonesa.
Ketchup.
Galletas saladas o dulces.
Caramelos.
Frituras.
Yema de huevo.
Postres en general, excepto postres dietéticos.
Azúcar.
Bebidas como la cerveza o los licores blancos.
Además de este régimen para los problemas de circulación, se debe efectuar una actividad física como el aeróbic, caminar, correr, bicicleta, natación, etc. El ejercicio es importante porque permite reducir los depósitos de grasa en el cuerpo y aumenta el metabolismo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario