Actualmente existe una desinformación sobre los estándares de calidad que han de cumplir las gafas de sol y la hora de decantarse por elegir un modelo u otro prima sobre todo un criterio estético y no de calidad.
El uso de gafas de sol de mala calidad y que no filtran adecuadamente los rayos ultravioletas puede provocar daños irreparables en nuestros ojos como la denominada queratitis (desprendimiento del epitelio de la cornea) o a largo plazo cataratas.
Unas gafas de sol de calidad óptima han de filtrar correctamente los rayos ultravioletas, amortiguar parcialmente la intensidad luminosa y disminuir el efecto de deslumbramiento.
El color que tienen los cristales de las gafas de sol no se debe a criterios estéticos, si no que obedece al uso principal que se le va a dar a las gafas de sol.
cristal verde: ideal para casos de hipermetropía y para la realización de deportes acuáticos
cristal naranja: indicado para los días nublados y poca luminosidad
cristal marrón: indicado en caso de miopía
En España el real decreto 1407/1992 regula los estándares de calidad que han de cumplir las gafas de sol y que básicamente fija un alto grado de protección contra los rayos ultravioleta, ausencia de rugosidades y bordes vivos, y neutralidad óptica.
Por otra parte, la Unión Europea considera las gafas como Equipo de Protección Individual (E.P.I) para ciertos tipos de trabajos y establece unas normas (Directiva 89/686 CEE) para que estas puedan homologarse con la marca C.E
http://www.rincondelasalud.com/es/sabiasque/G/gafas-de-sol_77.html#botonera_avance
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