El defensor Victor Lindelof acusó problemas repentinamente y debió marcharse al vestuario con los médicos en el duelo ante Norwich.


El caso obliga al mundo del fútbol a encender las luces de alarma. Los distintos eventos recientes en diferentes equipos de Europa ponen la lupa en lo sucedido con Victor Lindelof en el Carrow Road durante el duelo que mantuvieron Norwich y Manchester United por la 16ª fecha de la Premier League: acusó problemas repentinos en el pecho y debió dejar el partido.

El hecho ocurrió cuando el reloj marcaba los 70 minutos y con el marcador sin goles. En medio de una variante en el rival, Lindelof mostró sus primeras molestias, colocó sus manos sobre la rodilla y recibió la rápida consulta de un compañero Fred. El pedido de ingreso de los médicos fue inmediato. El futbolista de 27 años, que lleva cinco temporadas en el elenco de Manchester, se colocó en cuclillas y espero hasta la aparición de los especialistas.


Con algunos síntomas de fatiga, le costó abandonar la cancha caminando y decidieron llevárselo al vestuario sin dar mayores precisiones hasta el momento de su cuadro de salud. "Está en el vestuario. Se sintió un poco incómodo. Realmente no conozco muchos detalles. Parece estar bien y todos le deseamos lo mejor", expresó el capitán Harry Maguire tras el juego. "Le costaba respirar y tenía dolores en el pecho. Hicieron todas las pruebas y parece estar bien", advirtió el entrenador Ralf Rangnick.

Las expresiones del futbolista sueco -con pasado en el Vasteras de su país y Benfica de Portugal- posicionaron sobre el césped inglés los peores fantasmas ante la repetición de casos similares en el último tiempo. Si bien no se puede trazar un paralelismo exacto entre todos los hechos, la preocupación en el ambiente crece ante estas imágenes recordando lo vivido por Christian Eriksen durante junio de este año cuando disputaba un partido de la selección danesa por la Eurocopa.

Otro suceso emblemático relacionado a estas molestias de Lindelof ocurrió con el goleador argentino Sergio Agüero, que durante un encuentro del Barcelona ante Alavés pidió el cambio por un dolor en el pecho que luego se confirmó que estaba emparentado a una arritmia. Actualmente, el Kun permanece bajo tratamiento médico y sin la chance de jugar profesionalmente hasta que los profesionales dictaminen su cuadro médico.

Luego de esto, se vivieron hechos similares y algunos de ellos de mayor gravedad. Por ejemplo, Charlie Wyke, un futbolista inglés de 28 años que milita actualmente en el Wigan Athletic, se desplomó durante un entrenamiento en vísperas al partido de la League One contra Cambridge. John Fleck, de 30 años, también cayó repentinamente al suelo en el encuentro entre Sheffield United y Reading del Championship.

Adama Traoré, figura del FC Sheriff Tiraspol, cayó tendido en el suelo durante el cierre del partido ante el Real Madrid en la quinta jornada del Grupo D de la UEFA Champions League. El delantero maliense de 26 años se tomó el pecho y pidió asistencia médica en el minuto 78 de partido.