El ardor o acidez de estómago, también denominado pirosis, se caracteriza por una sensación de quemazón que comienza en la boca del estómago, detrás del esternón y de desplaza por el pecho hasta llegar a la garganta.
Este síntoma normalmente se presenta una hora después de ingerir los alimentos y puede persistir por varias más.
Medidas higiénicas o posturales que alivian esta sintomatología. Se aconseja, por ejemplo:
- Evitar recostarse después de las comidas, ya que esta posición favorece la subida de ácidos al esófago.
- No flexionar el tronco frecuentemente, en especial, después de comer.
- Elevar la cabecera de la cama unos 30º para dormir o acostarse.
- No usar prendas de vestir muy ceñidas.
- Suprimir el tabaco.
- Evitar las situaciones de estrés, nerviosismo o ansiedad, que ocasionan un aumento de la acidez.
Existe una serie de alimentos que es preferible evitar en caso de padecer este tipo de problema. Estos alimentos actúan relajando el cardias o aumentando la secreción de ácido.
En general,se recomienda una dieta moderamente rica en alimentos proteicos y baja en grasas. Los alimentos muy condimentados deberán eliminarse de la dieta, porque disminuyen, al igual que los alimentos grasos, la presión del esfínter.
Otros alimentos que deberán controlarse son el chocolate, el café y el té (debido a su contenido en xantinas, y en el caso del chocolate, además, por su riqueza en grasas); las bebidas alcohólicas, en especial el vino blanco y el cava.
Se aconseja modificar la dieta con arreglo a las siguientes recomendaciones generales:
- Mantener el peso adecuado, evitando el sobrepeso y la obesidad.
- Masticar y comer despacio, triturando bien los alimentos.
- Repartir la dieta en pequeños volúmenes. Se aconseja realizar de 4 a 5 comidas al día para no estimular excesivamente la secreción de ácidos gástricos.
- La última ingesta deberá hacerse con un mínimo de 2 horas antes de acostarse.
- Tomar una dieta rica en proteínas y pobre en grasas, a base de carnes magras, pescados, productos lácteos desnatados, etc., evitando fritos, rebozados, guisos, embutidos, leche entera, nata, mantequilla y salsas.
- Utilizar técnicas culinarias sencillas, sin adicción de grasa en la medida de lo posible: plancha, grill, horno, hervido, microondas, papillote, vapor...
- Evitar aquellos alimentos que:
· Relajan el cardias o retrasan el vaciamiento gástrico: bebidas alcohólicas y carbonatadas, cebolla, ajo, chocolate, café, té, grasas y quesos fermentados y muy curados.
· Irritan o lesionan la mucosa esofágica:
Frutas cítricas y sus zumos, tomate y derivados, café (también el descafeinado), bebidas carbonatadas, algunas especias (pimienta, pimentón, mostaza), alimentos muy calientes o muy fríos, productos integrales o muy ricos en fibras, algunas frutas y hortalizas como el melón, el pepino o el pimiento (según la tolerancia).
No hay comentarios:
Publicar un comentario