El Ministerio de Sanidad francés informó que el Instituto Pasteur ya identificó la nueva especie de enterobacteria ambiental, que contaminó una bolsa de alimentación que ocasionó la muerte de tres bebés en un hospital francés a principios de diciembre.
El germen se encontró luego de analizar una gran cantidad de bolsas de alimentación para recién nacido confiscadas en el hospital de Chambery (este) es “una enterobacteria ambiental, una nueva especie que no se había descrito hasta ahora y que aún no tiene nombre”, explicó un científico de Pasteur Jean-Claude Manuguerra.
En horas de la mañana de este martes, la ministra de Sanidad, Marisol Touraine, exigió la suspensión de las actividades del laboratorio que confeccionó las bolsas de alimentos, agregando que “el lugar o el modo de contaminación” del alimento se desconocía.
Explicó que el operativo se lleva a cabo desde que el 17 de diciembre cuando las autoridades sanitarias decidieron retirar 137 bolsas de alimentación sospechosas, producidas por el laboratorio Marette el pasado 28 de noviembre, y distribuidas en siete hospitales franceses.
Ante la medida, la justicia francesa inició una investigación por los “homicidios y lesiones no intencionadas, puesta en peligro deliberada de la vida del prójimo y fabricación de medicamentos sin respetar las reglas de las prácticas adecuadas”.
El fiscal de la República en Marsella (sudeste), Brice Robin, publicó la resolución del estudio en el que se determinó que de las diez bolsas de alimentación, seis “estaban contaminadas por una bacteria (…) Tres de estas seis bolsas estaban selladas, cerradas, no abiertas y, sin embargo, se revelaron contaminadas por un extraño germen, difícil de identificar, que supuso la muerte de los recién nacidos”, precisó.
“No excluimos ninguna pista y estaremos atentos a la búsqueda de posibles fallos en toda la cadena de fabricación, de transporte, de almacenamiento y de administración de estas bolsas de alimentación”, añadió el jurista.
Los tres bebés: Chloé, Théo y Milie murieron entre el 6, 7 y 12 de diciembre en el servicio de reanimación neonatal del hospital de Chambery, tras ser alimentados con el alimento reglamentario para los internos en esta área en refuerzo de la leche materna. Un cuarto bebé, que presentaba los mismos síntomas fue salvado en urgencias días después del hecho.
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