El trébol es una planta de la familia de las papilionáceas que encierra en su nombre cerca de 300 especies tales como el trébol rojo o el trébol blanco enano, ambos muy conocidos por sus propiedades medicinales y sus beneficios para curar enfermedades.
Pero en esta ocasión vamos a tratar sobre un tipo de trébol mucho más conocido por todos, el Trifolium Pratense o como es llamado vulgarmente, el trébol común.
El trébol común
Este tipo de planta habita en grandes cantidades, en zonas herbosas como prados o campos. Tiene un tono verde que va desde un color muy vivo, hasta su versión más oscura dependiendo de la edad que tenga el trébol y de las condiciones meteorológicas que haya soportado.
Por lo general esta hierba consta de tres hojas aunque raras veces se pueden hallar ejemplares con cuatro y, según cuentan los mitos, si tienes la fortuna de toparte con uno de ellos, la buena suerte te acompañará durante el resto de tu vida.
Lejos de historias de azar y buenaventura, lo que realmente posee el trébol común son unas propiedades curativas desconocidas para la inmensa mayoría. Hoy vamos a hablar sobre ellas.
Propiedades beneficiosas del trébol común
El trébol es una fuente muy rica de isoflavonas, una sustancia muy beneficiosa para la prevención de diversos tipos de cáncer que pueden presentarse en mujeres, como el cáncer de mama o el de ovarios. Además, estas mismas isoflavonas, ayudan también a combatir los síntomas de la menopausia.
Esta hierba posee propiedades antiasmáticas y expectorantes, por lo que su consumo en infusión es muy beneficioso en casos de asma, tos irritativa, gripes y bronquitis.
Es un aliado perfecto para casos de obesidad y retención de líquidos gracias a su carácter diurético. Por esta misma propiedad, se puede utilizar también para tratar enfermedades como la gota o la artritis.
En su uso externo el trébol es astringente y cicatrizante, siendo de gran ayuda para curar eccemas en la piel y para cerrar heridas de difícil curación y un remedio eficaz para la inflamación de los ojos y para aliviar los síntomas de enfermedades como la conjuntivitis.
Es una fuente de aminoácidos esenciales como la arginina o la leucina, que ayudan a mantener un buen estado del sistema nervioso y unos niveles de colesterol saludables, así como una correcto proceso digestivo y metabólico.
También presenta cantidades beneficiosas de algunos minerales muy implicados en el perfecto mantenimiento de músculos y huesos, tales como calcio, magnesio y potasio.
Ahora que ya conoces las múltiples propiedades saludables del trébol, consúmela fresca en ensalada o añádela a tu lista de infusiones favoritas y, esta planta te ayudará a mantenerte más sano y feliz.
Fuente: http://www.otramedicina.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario