miércoles, 27 de noviembre de 2013

Alimentos Funcionales, Alimentos Especiales


Cuando paseamos por los pasillos de cualquier supermercado, cada vez vemos nuevos productos en sus lineales, muchos de ellos son "alimentos con..., ricos en..., enriquecidos con..., bajos en..., contenido reducido en..., sin..., etc.", son los llamados alimentos funcionales. 

Pero, ¿qué es lo que hace funcional a un alimento?

En la actualidad, con la evolución y desarrollo de la industria alimentaria, el concepto de "nutrición adecuada" se está sustituyendo por el de "nutriciónóptima", aquella que además de aportar los nutrientes para satisfacer las necesidades orgánicas, incluye la potencialidad de los alimentos para mejorar la salud, el bienestar y reducir el riesgo de sufrir enfermedades.

Los numerosos estudios que demuestran la relación de la alimentación con el estado de salud y la prevención de determinadas enfermedades han hecho crecer el interés por los denominados alimentos funcionales. 

Los nuevos estilos de vida actuales han hecho que se abandonen muchos de los buenos hábitos de nuestra alimentación tradicional, haciendo que muchas veces no se ingieran todos los nutrientes necesarios para una correcta nutrición, es aquí dónde los alimentos funcionales llevarían a cabo un papel importante.

¿QU? SON LOS ALIMENTOS FUNCIONALES?

Son alimentos elaborados, no solo por sus características nutricionales, sino por cumplir una función específica como mejorar la salud o reducir el riesgo de sufrirenfermedades. 

Dicho de otra manera, son aquellos alimentos que aparte de aportar nutrientes, se ha demostrado científicamente que afectan beneficiosamente a una o varias funciones del organismo, además de proporcionar un papel preventivo al reducir el riesgo de aparición de enfermedades. 

Para que estos alimentos puedan llevar a cabo su función, se les añaden componentes biológicamente activos. Un alimento puede considerarse funcional si durante su procesado se le ha realizado alguna de las siguientes operaciones:

- Eliminación de un componente conocido como causante o determinante de una enfermedad, como puede ser el caso de las proteïnes alergénicas de ciertos alimentós o la eliminación de la lactosa de determinados productos lácteos.

- Aumento de la concentración de un componente de un alimento. Esta operación de fortificación, o de añadir un componente activo, hace que la dosis diària de éste se acerque a las recomendaciones nutricionales, lo que a largo plazo podria traducirse en una disminución de riesgos de enfermedad.

- Adición de un componente que normalmente no suele encontrar-se en la mayoría de alimentos.

- Reemplazo de macronutrientes, incrementando la biodisponibilidad o estabilidad de un componente conocido con el objetivo de produir un efecto funcional.Entre los alimentos funcionales más destacados, encontramos los alimentos enriquecidos o "fortificados".


COMPONENTES QUE HACEN FUNCIONAL A UN ALIMENTO
Estos componentes han estado siempre presentes en la naturaleza, pero en los últimos años ha sido cuando los investigadores han comenzado a identificarlos de forma aislada y a determinar los beneficios concretos que éstos proporcionan a nuestro organismo. 

Los componentes más destacados son: 

fibra dietética, azúcares alcoholes o azúcaresde baja energía, aminoácidos, ácidos grasos insaturadas, fitoesteroles,vitaminas y minerales, antioxidantes, bacterias ácido-lácticas y otrassustancias excitantes o tranquilizantes.


PROPIEDADES DE LOS ALIMENTOS FUNCIONALES

A día de hoy, las funciones y objetivos de salud a los que se ha dirigido la investigación en el campo de los alimentos funcionales son:

· Crecimiento y desarrollo: incluyendo adaptaciones de la madre durante el embarazo, el desarrollo del feto, el crecimiento y desarrollo del lactante y del niño. 

Para cumplir con este objetivo encontramos alimentos enriquecidos en hierro, yodo, ácido fólico, ácidos grasos (omega 3 y 6), calcio, vitaminas A y D, leches de fórmulas infantiles con nutrientes específicos que favorecen su crecimiento y desarrollo, etc.

· Metabolismo de sustancias: relacionado con el mantenimiento de un peso adecuado, mayor control de la glicemia o de las tasas de colesterol en sangre y los triglicéridos plasmáticos asociados a riesgo cardiovascular o con un adecuado rendimiento en la práctica de actividad física. 

Ejemplos de ello son los alimentos de bajo contenido energético (bajos en grasas o en azúcares simples), enriquecidos en omega-3 o grasa monoinsaturada como el ácido oleico y en fibra y bebidas y productos específicos para deportistas, como bebidas o barritas, entre otros.

· Defensa contra el estrés oxidativo: el consumo de sustancias antioxidantes contribuye a reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, degenerativas e incluso de cáncer, por el efecto barrera de estas sustancias frente al efecto nocivo de los radicales libres sobre el ADN o genes, las proteínas y los lípidos de nuestro cuerpo. 

Son productos enriquecidos con sustancias antioxidantes como vitamina C y E, beta-carotenos, selenio, cinc y fitoquímicos o sustancias propias de los vegetales.

· Sistema cardiovascular:contribuyen a reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, entre los que encontramos alimentos enriquecidos en ácidos grasos monoinsaturados, poliiinsaturados (omega 3 y 6), con sustancias antioxidantes, fitoesteroles, ciertas vitaminas del grupo B (B6, B9 y B12) y fibra.
· Función del tracto gastrointestinal: encontramos los alimentos probióticos, prebióticos y los enriquecidos en fibra soluble e insoluble o ricos en fibra.

· Funciones psicológicas y conductuales: relacionado con el apetito y la sensación de saciedad, el rendimiento cognitivo, el humor o tono vital y el estrés. 

Son los alimentos ricos en fibra y enriquecidos en fibra que tienen un alto poder saciante, alimentos con aminoácidos específicos, alimentos con sustancias excitantes del sistema nervioso (cafeína, ginseng, etc) o tranquilizantes (melisa).

TIPOS DE ALIMENTOS FUNCIONALES Y POSIBLES EFECTOS BENEFICIOSOS
ALIMENTO FUNCIONAL COMPONENTE 

FUNCIONAL POSIBLES EFECTOS EN LA SALUD

Leches enriquecidas Con ácidos grasos omega-3 (EPA y DHA)

Con ácido oleico

Con ácido fólico

Con calcio

Con vitaminas A y D

Con fósforo y cinc Contribuyen a reducir el riesgo de enfermedad cardiovascular, el riesgo de ciertos tipos de cáncer y mejoran el desarrollo del tejido nervioso y las funciones visuales. Pueden reducir los procesos inflamatorios.

Ayudan a reducir la concentración de colesterol en sangre y el riesgo de enfermedad cardiovascular.
Pueden disminuir malformaciones en el tubo neural y ayudan a reducir el riesgo de enfermedad cardiovascular.

Ayudan al desarrollo de huesos y dientes. Intervienen en la transmisión nerviosa y los movimientos musculares. Pueden prevenir la osteoporosis.

Favorecen la función visual y la absorción del calcio, respectivamente.

Ayudan al desarrollo de los huesos y mejoran el sistema inmunológico. Leches infantiles de iniciación y de continuación

Con ácidos grasos

Con vitaminas y minerales Ayudan a mejorar el desarrollo de los niños de 0 a 3 años.Estos alimentos pueden tomarse cuando la lactancia materna no es posible. Yogures enriquecidos Con calcio

Con vitaminas A y D Ayudan al desarrollo de huesos y dientes. Intervienen en la transmisión nerviosa y los movimientos musculares. Pueden prevenir la osteoporosis.

Favorecen la función visual y la absorción del calcio, respectivamente. Leches fermentadas Con ácidos grasos omega-3 (EPA y DHA)* y ácido oleico

Con bacterias probióticas específicas

Contribuyen a reducir el riesgo de enfermedad cardiovascular, el riesgo de ciertos tipos de cáncer y mejoran el desarrollo del tejido nervioso y las funciones visuales.

Pueden reducir los procesos inflamatorios.

Favorecen el funcionamiento del sistema gastrointestinal y reducen la incidencia y la duración de las diarreas. Mejoran la calidad de la microflora intestinal.

Zumos enriquecidos Con vitaminas y minerales Vitaminas A y D: Favorecen la función visual y la absorción del calcio, respectivamente.

Calcio: Ayudan al desarrollo de huesos y dientes. Intervienen en la transmisión nerviosa y los movimientos musculares.Pueden prevenir la osteoporosis.

Hierro: Facilitan el transporte de oxígeno en la sangre. Pueden prevenir la aparición de anemias. 
Cereales fortificados Con fibra y minerales

Fibra: Ayudan a reducir el riesgo de cáncer de colon. Mejoran la calidad de la microflora intestinal.

Hierro: Facilitan el transporte de oxígeno en la sangre. Pueden prevenir la aparición de anemias.

Pan enriquecido Con ácido fólico Pueden disminuir malformaciones en el tubo neural y ayudan a reducir el riesgo de enfermedad cardiovascular.

Huevos enriquecidos Con ácidos omega-3 Pueden reducir el riesgo de enfermedad cardiovascular. 
Margarinas enriquecidas Con fitosteroles Ayudan a disminuir la concentración de colesterol en sangre y el riesgo de enfermedad cardiovascular.

Sal yodada Con yodo El yodo facilita la fabricación de hormonas tiroideas, imprescindibles para un desarrollo físico y psíquico normal y evitar disfunciones tiroideas

*EPA: ácido eicosapentaenoico. *DHA: ácido docosahexaenoico

¿A QUIÉN ESTÁ DESTINADO SU CONSUMO?

Los alimentos funcionales pueden formar parte de la dieta de cualquier persona, pero están especialmente indicados para aquellos grupos de población con necesidades nutricionales especiales, como pueden ser los niños y las mujeres embarazadas, enestados carenciales, intolerancias a determinados alimentos, colectivos conmayor riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares, gastrointestinales,osteoporosis, diabetes, etc., y personas mayores.

¿SÓN REALMENTE NECESARIOS?

Aunque los alimentos funcionales resulten beneficiosos para la salud y aporten un complemento saludable a nuestra dieta, debemos tener claro que no curan ni previenen por sí solos alteraciones ni enfermedades.

Estos alimentos no son indispensables, sino que deben ser considerados como una opción a tener en cuenta en determinadas circunstancias concretas y en caso de necesidad justificada.

Las autoridades alimentarias y sanitarias de todo el mundo reclaman que los consumidores hagan unconsumo responsable de estos alimentos, siempre formando parte de una dieta equilibrada y en ningún caso como sustituto de la misma.

Aunque la demanda haya experimentado un gran crecimiento en los últimos años, la comunidad científica mundial está evaluando la idoneidad para la salud humana del consumo de estos alimentos, sobretodo considerando el consumo a largo plazo.

Uno de los problemas relacionados con este tipo de productos enriquecidos o "fortificados" en determinados nutrientes, puede ser el sobreconsumo de los mismos, al encontrarse estos nutrientes en una amplia gama de alimentos y por el afán de la población de consumir cuantos más alimentos enriquecidos mejor, creyendo así que su salud se verá beneficiada.





¿Funcionan los alimentos funcionales?

Parecería un contrasentido que dedicáramos un adjetivo para definir y distinguir un sustantivo (“funcionales” para “alimentos”) y que resultara que al final los “alimentos funcionales” funcionaran menos o peor que a los que no dedicamos tal distinción. Pues algo de esto hay, pero vamos por partes.

¿Qué son los alimentos funcionales (AF)?

Pese a ser un término popularmente aceptado no es posible encontrar a día de hoy una referencia como tal, una definición en cualquiera de las normas o sistemas jurídicos que regulan estas materias.

No obstante, la característica principal que suele ser utilizada para considerar un alimento como funcional es que proporcione un beneficio para la salud más allá de los que son previsibles obtener a partir de su composición nutricional (según el International Life Sciences Institute en Europa -ILSI Europe-)

En este sentido, y ante la carencia de una definición legal propiamente dicha, el enfoque de las distintas agencias reguladoras en relación con los alimentos en general y también con este tipo en particular, está centrada en verificar las distintas declaraciones nutricionales y de propiedades saludables que se hacen y, para ello, tener muy en cuenta la base científica que hay detrás para decidir si se puede o no hacer una determinada declaración.

¿Qué aspecto tienen los alimentos funcionales?

Una característica de los AF muchas veces olvidada por el consumidor medio es que estos han de seguir siendo ante todo un alimento y deben demostrar sus resultados en cantidades que puedan ser normalmente consumidas en la dieta.

Es decir, los AF no vendrán nunca en forma de píldoras, cápsulas, polvos, jarabes, etc. Dicho claramente: han de tener el aspecto de un alimento y presentarse en forma de comida.

Un AF puede ser un alimento al que se le haagregado un componente (p.ej. lácteos con vitamina E) o eliminado (p.ej. leche desnatada); un alimento donde la naturaleza de uno o más componentes ha sido modificada (p.ej. preparado lácteo en el que se sustituye su grasa por grasa “saludable” como los omega tres), un alimento en el cual la biodisponibilidad de uno o más de sus componentes ha sido modificada (leche enriquecida con calcio); o cualquier combinación de las anteriores posibilidades.
Como se puede comprobar por los ejemplos el mundo de los lácteos ha sido y es ampliamente empleado para la producción de AF, pero la lista es interminable.

En resumen, la idea sería obtener algo así como un alimento tuneado (que no customizado)

¿Para qué sirve un alimento funcional?

Teóricamente un AF podría ayudar y emplearse en la prevención y reducción del riesgo de enfermedades, con la finalidad además de reducir costes sanitarios y con la idea de propiciar unmejor envejecimiento, pero en realidad una de las principales utilidades de los AF parte del interés de la industria alimentaria en hacer una mayor caja (y esta respuesta merece la explicación contenida en la siguiente pregunta)

¿Quién regula las declaraciones nutricionales y de propiedades saludables de los AF?

En Estados Unidos es la Food and Drug Administration (FDA) quién se encarga de estas cosas, un país en el que este tipo de iniciativas comerciales saludables tuvieron un especial auge en los años 80 después de que el filón lo “pusieran de moda” las autoridades sanitarias japonesas con toda su buena intención (quiero pensar).

En Europa la ausencia de legislación durante muchos años propició que esto pareciera la casa de la Charito, sin embargodesde 2006 contamos con un Reglamento que regula esta situación y que nadie pueda alegar cualquier cosa, lo primero que se le ocurra, a la hora de venderte un alimento y poner a la salud como reclamo (o al menos tratar de hacerlo).

En concreto se trata del REGLAMENTO (CE) No 1924/2006 DEL PARLAMENTO EUROPEO Y DEL CONSEJO de 20 de diciembre de 2006 relativo a las declaraciones nutricionales y de propiedades saludables en los alimentos.

Este Reglamento establece que sea la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) la encargada de validar, autorizar o rechazar las alegaciones que los distintos productores de AF pudieran hacer en un determinado momento.

En 2006 se abrió el plazo para que estos productores sugirieran la posibilidad de poder hacer determinadas declaraciones y alegaciones para sus alimentos.

Según cuenta Jose M. López Nicolás (@Scientiajmln) en una magnífica entrada en el blog de Amazings (“Las grandes mentiras en el etiquetado de los alimentos funcionales”), a finales de 2011 la EFSA terminó el trabajo de evaluar los miles de solicitudes que cientos de empresas hicieron con el fin de vender sus maravillosos productos.

El trabajo fue ímprobo: fueron presentadas, ná más y ná menos que 44.000 solicitudes. Se hizo una criba seleccionando sólo aquellas que cumplían con los requisitos de la solicitud, quedaron 10.000.

Más tarde la EFSA elaboró una lista de 4.000 declaraciones agrupándolas por temas.

En última instancia se pidió a los solicitantes que ampliasen más información o hicieran aclaraciones y, al final se terminaron por evaluar un total de 2.758 solicitudes.

¿Y el resultado de la evaluación de estas solicitudes? Aplastante: Sólo una de cada cinco declaraciones presentadas estaba basada en pruebas científicas sólidas.

El resto de solicitantes tendrán (tienen) dos posibles caminos a partir de ahora (que además no son excluyentes):

Retirar la publicidad de sus productos.

Seguir investigando para aportar pruebas si quieren decir lo que la EFSA les ha prohibido decir.
¿Funcionan los alimentos funcionales?

Como ya he comentado, no me toca a decidir si los AF funcionan o dejan de hacerlo, eso lo ha de decir la EFSA.

No obstante, para responder a esta pregunta me quedo con parte del texto contenido en el mencionado Reglamento, muy edificante, que en su artículo 3, apartado d, afirma que:

“La utilización de declaraciones nutricionales y de propiedades saludables no deberá: [...] afirmar, sugerir o dar a entender que una dieta equilibrada y variada no puede proporcionar cantidades adecuadas de nutrientes en general”.

Es decir, a la población general no le ha de quedar ninguna duda de que es más efectivo tener un “patrón de alimentación funcional” basado en las más recientes recomendaciones que llenar el carro del súper con alimentos cuajados de alegaciones por todas partes.

Esta estrategia, además de más recomendable cara a la salud será, probablemente,mucho más económica y sabrosa.
Si quieren prescindir de los AF y tener un patrón alimentario adecuado les recomiendo que visiten alguna de las primeras entradas de este blog, hay varias, pero entre ellas yo destacaría dos por su sencillez:


El estar sanos depende de nosotros mismos, debemos darle importancia a los alimentos que consumimos, sobre todo lo que contienen y para qué sirven.

Aquí te dejo el top 10 de alimentos funcionales, para que conozcas un poco más sobre ellos

Comer una dieta balanceada es la manera ideal para asegurar el consumo adecuado de vitaminas y minerales, pero la mayoría de los consumidores simplemente no comen una variedad de alimentos, especialmente frutas y verduras.

Además de que no quieren tomar pastillas para la entrega de nutrientes.

Como resultado se ha producido un aumento de los alimentos funcionales que han tratado de salvar algunas brechas alimentarias específicas.

Los alimentos funcionales son un término usado para describir los alimentos o sus ingredientes, que pueden proporcionar una salud de beneficio más allá de la nutrición básica.

Estos alimentos pueden incluir alimentos integrales (frutas y verduras), así como jugo de naranja fortificado con calcio, alimentos enriquecidos o mejorados y una dieta de suplementos que tienen un efecto beneficioso sobre la salud.

Unos ejemplos de alimentos que las investigaciones han demostrado los beneficios de salud incluyen:

1. Productos de avena contienen psyllium, ayudan areducir el colesterol y los niveles de riesgo cardíaco.
2. Los de de soja, reduce los niveles de colesterol y el riesgo de enfermedad cardiaca.
3. Los pescados grasos, contienen ácidos grasos omega-3 que pueden prevenir el accidente cerebrovascular y enfermedad cardíaca.
4. El jugo de arándano, reduce el riesgo de infecciones del tracto urinario.
5. Salsa de tomate y productos cocidos de tomate, contienen licopeno que ayudan a proteger ciertos tipos de cáncer.
6. El vino tinto contiene resveratrol y polifenoles que son buenos para proteger contra enfermedades del corazón.
7. El té negro y verde tienen un efecto preventivo del cáncer.
8. El yogur contiene probióticos, que tienen efectos beneficiosos sobre la función gastrointestinal y la inmunidad.
9. Las cebollas y el trigo, los plátanos y la alcachofa de Jerusalén ("sunchokes"), el ajo y una gran variedad de frutas y verduras contienen oligosacáridos que ayudan a prevenir el estreñimiento, protege la función del hígado, reduce la presión arterial y el colesterol sérico y pueden tener un efecto contra el cáncer. 
También pueden desempeñar un papel en la prevención de la osteoporosis. Los brotes de brócoli contienen sulforafano, que estimula al cuerpo a producir sus propios protectivephase enzima II y neutraliza los radicales libres.
10. Alimentos bajos en grasa como parte de una dieta baja en grasas (por ejemplo, queso, bocadillos, carnes, pescados, productos lácteos) son bajos en grasa total y grasa saturada y ayudan a reducir el riesgo de cáncer y enfermedades coronarias.

No hay duda de que el papel de los alimentos funcionales para reducir el riesgo de enfermedades es prometedor, pero una gran cantidad de investigaciones siguen siendo necesaria para probar su eficacia. 
Los alimentos tradicionales deben ser la base para el futuro de los alimentos funcionales, con un enfoque en la mejora de sus componentes naturales a través de la fortificación.

Ejemplos futuros pueden incluir la adición de ácidos grasos omega-3, los ácidos grasos de queso y los huevos (en la actualidad los huevos omega se están poniendo a prueba en el Medio Oeste), vitamina B y ácido linoleico conjugado (CLA) a la leche.

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