Según la medicina china, el qi –nuestra energía vital– está presente en todo nuestro cuerpo. Unos canales sutiles, los meridianos, lo hacen circular siguiendo un trazado preciso.
Imagina una red hidráulica concebida para regar un amplio terreno: canales principales, derivaciones, canales secundarios, cuencas, bombas, esclusas. ¿Hay falta de agua en alguna parte del terreno? Las bombas se ponen en marcha. ¿Hay demasiada agua en otra parte? Una esclusa se abre…
A esto puede parece el funcionamiento de los meridianos de acupuntura en el cuerpo humano: una red compleja, constituida por doce meridianos "regulares", ocho meridianos "extraordinarios", doce meridianos "distintos", quince meridianos "colaterales", y una cantidad de pequeños meridianos anexos.
La energía qi
Los meridianos sirven para hacer circular el qi, la energía primordial de la filosofía taoísta china, el soplo de la vida presente en todo, en los seres animados como en las cosas inanimadas, en el hueco de la mano como en el fondo del cosmos. Para los taoístas, el qi tiene dos polaridades: esquemáticamente, la energía yin (de naturaleza femenina) y la energía yang (de naturaleza masculina).
Cuando el qi circula perfectamente en nuestro cuerpo, es señal de buena salud física y moral, puesto que para la medicina china físico y moral, cuerpo y espíritu están indivisiblemente unidos. Cuando el qi se queda bloqueado en una intersección de meridianos, cuando hay un exceso en tal meridiano o una falta en otro, es signo de enfermedad. Igualmente, al igual que un médico occidental que se refiere a la circulación sanguínea para establecer un diagnóstico, un médico chino se refiere a la circulación del qi.
Un acupuntor utiliza esencialmente los doce meridianos regulares y dos meridianos particulares, sobre los cuales se reparten 670 puntos de acupuntura, jugando el papel de esclusa. Aplicando una aguja sobre un punto específico, el acupuntor dispersa la energía bloqueada. Al revés, calentando un punto con ayuda de un "moxa", permite que la energía colme el vacío.
Los doce meridianos
Los doce meridianos regulares se desdoblan y recorren nuestro organismo en función de un itinerario preciso, y sirven de enlace entre los órganos, las vísceras, los tejidos. Cada uno de ellos está asociado a una función: digestión, respiración, asimilación… Por esta razón, se les ha dado el nombre correspondiente a su órgano: meridiano hígado, meridiano pulmón…
Puesta a punto hace cuatro mil años, la teoría de los meridianos, muy compleja, no siempre es bien aceptada por la medicina occidental, puesto que estos canales de energía son invisibles al ojo de la ciencia, aunque no al de los acupuntores chinos, que afirman poder sentir el flujo del qicon las puntas de sus dedos.
http://otramedicina.imujer.com/6088/meridianos-los-caminos-del-qi
No hay comentarios:
Publicar un comentario