Algunas veces, al levantarnos nos tomamos un café o un zumo para no sentir un hueco en el estómago y retrasar la primera comida del día. Es el caso de muchos y, además todo lo contrario a lo que deberíamos estar haciendo para tener un cuerpo en forma.
Aunque la creencia de que “el desayuno es la comida más importante del día” es en cierta forma un mito, porque no debemos descuidar ninguna, sí es importante darnos una pequeña recarga al comenzar la mañana para mantenernos equilibrados durante todo el día.
A continuación proponemos 6 consejos que debes poner en práctica y transformarlos en hábitos si quieres perder peso, mantenerte en forma y tener una vida sana.
Los hábitos matutinos marcan la pauta para el resto del día.
Prepara tus snacks
Además de ayudarte a despertar más temprano, preparar tus propios snacks para consumir entre comidas te ayudará a tener más control en la selección de lo que ingieres.
Asegúrate de implementar alimentos que te resulten llamativos y al mismo tiempo sean de tu agrado, así evitarás tener que conformarte con las barritas de cereal y otro tipo de alimentos procesados.
Desayuna proteínas
Si bien ninguna comida es más importante que todas las demás, la ingesta de proteínas en un momento particular es importante, así que asegúrate de que ese momento sea el desayuno.
El consumo de proteínas en plena mañana te ayudará con el metabolismo del resto del día, y recargará tu energía.
Duerme más y mejor
Un estudio realizado por The American Journal of Clinical Nutrition reveló que la menor cantidad de sueño adquirido conlleva a altas probabilidades de subir de peso.
Las personas que descansan más de 7 horas suelen presentar un apetito menor, un 14% específicamente y consumen 300 calorías menos. Para no interrumpir tu régimen alimenticio, sigue este consejo lo mejor que puedas.
Dormir bien y suficiente es necesario para el equilibrio metabólico de tu cuerpo.
Toma agua, antes que nada
Para rehidratar el cuerpo, al despertar, lo más recomendable es tomar uno o dos vasos de agua, esto también ayuda a quemar calorías.
Además, la ingesta de agua en las primeras horas del día te hace sentir saciedad y no confundes la sed con el hambre, provocando la ingesta excesiva de otros alimentos luego del desayuno.
Evita los zumos
Podría pensarse que un zumo de naranja es la mejor opción para empezar el día. Pues no es la verdad, y como un jugo equivale a comer el azúcar de varias piezas de fruta pero no la fibra, es uno de los más frecuentes errores que puedes cometer si estás interesado en tu salud y tu cuerpo.
Los zumos, naturales e industriales, contienen más calorías que un refresco, así que si quieres ingerir fruta, lo mejor será hacerlo entera.
Olvídate del café
El café es la adicción más silenciosa, y parece que millones de personas necesitan una taza de esta bebida para empezar el día, pero la verdad es que menos de una taza al día sería suficiente.
Para reemplazar el café, una infusión de limón con un toque de pimienta roja es ideal, despierta tu metabolismo, se deshace del sueño y quema calorías.
Con estos consejos puedes tener una mejor idea lo que te conviene y no te conviene en los primeros minutos del día. Infórmate más al respecto y estarás encaminado a tener mejores hábitos alimenticios y a una vida más sana.
FUENTE:
por Waleska Bustos
http://www.labioguia.com/notas/6-habitos-matutinos-para-perder-peso-ganar-energia-y-tener-una-vida-sana
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