Es la gran pregunta que todos nos hemos hecho en algún momento ¿Por qué mi pareja me está engañando o me ha engañado?
La infidelidad se da en todas las sociedades y edades, a veces se descubren, otras veces se prefiere mirar hacia otro lado y en algunas circunstancias uno se pone frente a ellas, las mira y tiene que decidir que hacer con ella ¿Me volverá a traicionar?
Conocer la verdadera razón por la que una persona engaña a su pareja a veces resulta demasiado complejo, no lo dicen por temor a hacer daño al otro, buscan una excusa que les haga quedar bien ante la otra persona o tan si quiera lo saben y se han dejado llevar por su deseo sin pensar en las consecuencias.
Realmente son muchas las posibilidades que puede llevar a que una persona le sea infiel a otra pero, en su mayoría, se podrían resumir en que hay un problema de insatisfacción o una necesidad de huida:
Hay relaciones de pareja que están sumidas en las rutinas y en la monotonía, no hace falta llevar años para llegar a esto. Una forma de romper esa monotonía es buscar experiencias nuevas, volver a sentirse valorado ante los ojos de otra persona, crear interés y el juego del coqueteo.
Tener una relación de pareja seria es un compromiso que a veces resulta demasiado angustiante, cuando quieres a alguien y le permites que entre en tu corazón le estás dando un poder que no se pronuncia, una cierta dependencia emocional hacia esa persona que puede llevar a que uno se precipite a los brazos de otro con tal de evitar esa sensación porque ¿Y si luego esa persona me falla qué hago?
A veces, por muy a gusto que se esté con una pareja no implique que en las relaciones íntimas se funcione igual de bien, puede haber problemas o una falta de armonía, diferentes gustos en la cama, etc. Esta insatisfacción sexualtambién puede originar en buscar fuera lo que no se encuentra dentro de la pareja.
Cuando hay una adicción a las relaciones íntimas es muy difícil que la persona pueda mantenerse fiel a una sola pareja.
En otras ocasiones, uno se da cuenta de que la otra persona ya no le mira de la misma manera, ya no le hace sentir especial ni se siente valorado ni emocional ni físicamente. Su autoestima decae y necesita volver a sentirse sexy, excitante para alguien.
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