Hoy en día todo el mundo busca fuentes alternativas de energía. Las autoridades de Toulouse, Francia, lanzaron una iniciativa revolucionaria al respecto que resulta, además, extremadamente económica para el presupuesto municipal.
Con el objetivo de iluminar las calles de la localidad, pero sin afectar a los recursos financieros de la ciudad, han puesto toda la responsabilidad en los propios transeúntes.
En las aceras de la localidad se han instalado bloques especiales con microchips, sensores y generadores. El sensor percibe la energía creada por la pisada de cada transeúnte, la transmite al generador y el generador produce corriente eléctrica. Todos los bloques están comunicados entre sí y forman una red, lo que garantiza una iluminación uniforme para las calles.
Tiempo atrás, el sistema fue sometido a prueba en una discoteca en Rotterdam. La gente iluminaba la pista del local bailando. La tecnología llamó la atención de grandes empresas y, en caso de resultar exitosos los experimentos que se están llevando a cabo, puede llegar a aplicarse ampliamente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario