MARTES, 30 de octubre (HealthDay News) -- Los apagones y las inundaciones provocadas por la "súper tormenta" Sandy podrían llevar a problemas con la seguridad de los alimentos, y las personas deben tomar medidas para garantizar que sus suministros de alimentos permanezcan accesibles y en buen estado, aconsejan las autoridades del gobierno federal.
"Mantener la comida a temperaturas seguras durante un apagón y protegerla de las inundaciones es esencial para evitar las enfermedades transmitidas por los alimentos en las emergencias climatológicas", señaló en un comunicado de prensa del Departamento de Agricultura de EE. UU. (USDA) Elizabeth Hagen, subsecretaria de seguridad alimentaria del USDA.
"Exhortamos a los residentes en el trayecto anticipado de la tormenta que incluyan un termómetro, hieleras e hielo seco en sus listas de necesidades para el huracán Sandy. Como último recurso para la seguridad de la comida, ante la duda, descártela", aconsejó.
Los Servicios de Seguridad e Inspección Alimentaria (FSIS) del USDA describen las medidas de seguridad de la comida que debe tomar para prepararse para el clima extremo:
- Un termómetro en la nevera y en el congelador puede ayudar a determinar si la comida está en buen estado durante los apagones. La temperatura de la nevera debe ser de 4 Cº (40 Fº) o menos, y en el congelador debe ser de -18 Cº (0 Fº) o menos.
- Guarde la comida en estanterías elevadas para que no entre en contacto con el agua contaminada en caso de inundación.
- Empaque la comida de forma apretada en el congelador. Esto ayuda a que la comida permanezca fría más tiempo.
- Congelar las sobras, la leche, la carne y las aves frescas que quizás no necesite de inmediato puede ayudar a mantenerlas a una temperatura segura durante más tiempo.
- Tenga hieleras a mano para guardar la comida congelada en caso de que la electricidad falle durante más de cuatro horas.
- Compre o haga hielo y guárdelo en el congelador para usarlo en la nevera o en una hielera. Congele paquetes de hielo por adelantado para usarlos en las hieleras. Haga planes por adelantado, y entérese de dónde se pueden comprar el hielo seco y los bloques de hielo.
Si la electricidad falla, mantenga las puertas de la nevera y el congelador cerradas siempre que sea posible. Una nevera mantiene la comida fría durante unas cuatro horas si mantiene la puerta cerrada, y un congelador lleno mantiene su temperatura unas 48 horas, mientras que un congelador medio lleno mantiene su temperatura durante unas 24 horas, según los FSIS.
Si no hay electricidad durante más tiempo, compre hielo seco o en bloque para mantener la nevera y el congelador tan fríos como pueda. Unos 23 kilos (50 libras) de hielo seco pueden mantener un congelador lleno de medio metro cúbico (18 pies cúbicos) frío durante dos días.
Cuando vuelva la electricidad tras una emergencia climática, debe revisar la temperatura de la nevera y el congelador. Si es de 4 Cº (40 Fº) o menos, la comida está en buen estado. Si no tiene un termómetro en el congelador, revise cada paquete de comida. Si la comida todavía tiene cristales de hielo, o está por debajo de los 4 Cº (40 Fº) cuando la revise con un termómetro de cocina, se puede volver a congelar de forma segura, según el FSIS.
Descarte cualquier alimento perecedero (como la carne, las aves, el pescado, los quesos blandos, la leche, los huevos, las sobras y los artículos de deli) que hayan estado en la nevera o en el congelador por encima de los 4 Cº (40 Fº) durante dos o más horas.
Tire cualquier alimento que no esté en un recipiente hermético si hay alguna probabilidad de que haya entrado en contacto con el agua de las inundaciones. Los recipientes con tapas de enroscar, tapas que abrochan, tapas anti derrame y tapas de corona no son herméticos. También descarte las tablas de cortar de madera, los utensilios plásticos, las teteras de los biberones y los chupetes que entren en contacto con el agua de las inundaciones.
Lave todas las sartenes de metal, platos de cerámica y utensilios que entren en contacto con el agua de las inundaciones. Use agua enjabonaba y desinfecte los artículos hirviéndolos en agua limpia o metiéndolos en una solución de 1 cucharada de lejía con cloro líquida sin olor por cada galón (3.75 litros) de agua potable durante 15 minutos.
Use agua embotellada que no haya entrado en contacto con el agua de la inundación. Si no hay agua embotellada disponible, hierva agua del grifo.
Nunca prueba la comida para determinar si es segura, y ante la duda, tírela.
Traducido del inglés: miércoles, 31 de octubre, 2012Artículo por HealthDay, traducido por Hispanicare
FUENTE: U.S. Department of Agriculture Food Safety and Inspection Service, news release, Oct. 26, 2012
HealthDay
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