En las islas de Cerdeña, Okinawa o Íkara (Grecia) el número de personas de más de cien años es más alto que en el resto del mundo
Los motivos por los que la longevidad de los habitantes de ciertas zonas parece alargarse es aún desconocido. Sea como fuere, hay lugares en la Tierra donde parece que la gente firma un contrato con la muerte para escapar de sus garras por un tiempo extra.
Un estudio de la revista National Geographic demuestra que existen este tipo de lugares casi milagrosos. Zonas alejadas entre sí que, por una serie de características comunes, parece que han encontrado la receta para alargar la vida. Sus habitantes alcanzan la cifra de los cien años con relativa facilidad y todo gracias a sus hábitos de vida.
La isla de Cerdeña, la de Okinawa en Japón o la «Loma Linda» en California son algunos ejemplos. Tres puntos distanciados entre sí por miles de kilómetros. Curiosamente parece localizarse en puntos equidistantes uno de otro, a la misma altura. Si marcaramos en un mapa de la Tierra los puntos podríamos unirlos con una recta casi perfecta.
Los cifras hablan por si solas. En Cerdeña hay 22 centenarios por cada 100.000 personas, un récord que solo puede igualar la isla japonesa de Okinawa. Además el oncólogo y exministro de Sanidad italiano Umberto Veronesi asegura que en Cerdeña la media de la duración de la vida es de 81,2 años y la tasa de enfermedades cardiovasculares o de osteoporosis son más bajas que en el «continente», informa EFE.
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Como curiosidad de la isla de Cerdeña cabe destacar que en sus tierras vive la familia más longeva del mundo, cuyos hermanos están en una horquilla de entre 78 y 105 años. Según cuentan ellos parece ser que la «sopa minestrone», típica de la localidad, es el secreto para alargar la larga vida. Por su parte, en la localidad californiana los protagonistas son un grupo de adventistas del séptimo día cuyo modo de vida les hace vivir diez años más que la media estadounidense, según el estudio de National Geographic.
La isla «mágica» griega
Otro lugar «mágico» es una pequeña isla de Grecia. Según apunta el New York Times en un reportaje, la isla de Ikaria es otro de estos sitios donde los habitantes parecen haber detenido el reloj. Allí vive Stamatis Moraitis, un anciano de 102 años al que le diagnosticaron cáncer de pulmón cuando tenía 60. Por aquella época aún vivía en Estados Unidos. Era 1976 y le dijeron que solo le quedaban seis meses de vida, por lo que decidió volver a su pueblo natal en Grecia. Hoy, 36 años después, cuenta al corresponsal del Times que «todos aquellos médicos ya murieron» mientras él sigue arreglando las viñas que rodean su casa típica, a pocos metros del Mediterráneo.
Sea verdadera o no la historia que cuenta el anciano Stamatis Moraitis, lo que sí son claros son los datos de la Universidad de Atenas, que mediante un estudio ha demostrado que la gente en Ikaria alcanza los 90 años años de edad con un promedio dos veces y medio superior a lo que lo hacen los norteamericanos. Además, enfermedades propias de la edad como el Alzheimer o accidentes cardiovasculares se dan con menos frecuencia en la isla.
La dieta saludable, la falta de estrés y una actividad física constante pero no excesiva paercen ser las causas de la longevidad y buena salud de estos grupos de hombres y mujeres centenarios.
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