Enviado por joansisa on Jue, 10/24/2013 - 17:46
Como hemos visto en diferentes artículos, el aloe vera es una de las plantas medicinales más importantes. Sus aplicaciones son muy amplias, lo utilizamos para curar heridas, dolores musculares, problemas respiratorios, erupciones de la piel, etc. Y es algo lógico si tenemos en cuenta todo lo que este elemento natural nos puede aportar: gran variedad de vitaminas, favorece la cicatrización, aminoácidos que permite la elaboración de proteínas o un alto nivel de minerales esenciales para nuestra salud entre otros.
Viendo todos estos beneficios que ofrece no es de extrañar que se comercialice el aloe vera con un sinfín de productos, tanto de salud como de cosmética. Se ha popularizado tanto su uso que para muchos aficionados de la medicina natural supone la panacea para un gran número de dolencias. Son muchos los que han decidido cultivarla en casa para poder recurrir a ella en cualquier momento. Sin embargo, el hecho de tratarse de una planta que encontramos en la naturaleza no quiere decir que sea un remedio sin ninguna contraindicación. Como cualquier otra planta de uso medicinal, el aloe vera tiene una serie de riesgos sobre los que debemos informarnos antes de comenzar a consumirla.
Contraindicaciones del aloe vera
Antes de comenzar a ver en qué casos no deberíamos recurrir a esta planta, hay que aclarar que se suele aplicar sobre la piel o el cabello para tratar heridas o sarpullidos, por ejemplo, así como por vía oral, es decir, ingiriendo el gel o jugo de la hoja del aloevera. Es en este último caso cuando realmente aparecen la mayoría de los riesgos. En caso deaplicarlo de forma externa, para comprobar si no es apropiado para nuestro caso particular, bastará con aplicar una pequeña cantidad de este gel sobre una zona de nuestra piel y dejarlo durante unos minutos. Si observamos alguna reacción alérgica, por ejemplo un enrojecimiento importante, posiblemente quiera decir que no toleramos sus componentes. Para este caso concreto lo ideal sería acudir a un médico para asegurarnos que realmente tenemos alergia a estaplanta.
Si nuestra intención es consumir el aloe vera por vía oral, ingiriéndolo totalmente, hay un caso en el que deberíamos evitarlo: embarazadas y mujeres lactantes. Esta planta origina un efecto laxante que provoca contracciones en el útero, de ahí que sería muy arriesgado para la salud del feto. Aunque en teoría el peligro aparecería ante un consumo excesivo, deberíamos consultar con un médico si es posible consumir una cantidad determinada, no tomar la decisión nosotros mismos.
Para los niños pequeños tampoco resulta nada adecuado, pues generalmente su consumo de lechees mayor, un ingrediente que podría reaccionar con el jugo de esta planta y provocar la aparición de diarrea.
Quienes consuman medicación basada en corticoidesdeberían evitar su consumo, pues incrementaría el efecto, llegando a ser peligroso para la salud.
En caso de diabéticos, es habitual recurrir al aloe vera, pues reduce el nivel de azúcar en sangre. Sin embargo, si se trata de casos que ya se medican para controlar este nivel, es posible que se produzca un descenso peligroso de azúcar en sangre, por lo que no debería consumir esta planta a no ser que pueda controlar constantemente su nivel de azúcar.
Otro caso especial es el de quienes toman medicación coagulante, pues uno de los efectos del aloe vera es hacer la sangre más fluida, por ello podríamos provocar una reacción en nuestros vasos sanguíneos, algo que ocasionaría la aparición de hemorragias en diferentes partes del cuerpo.
Y por último, recordar que al ingerir esta planta medicinal también provocamos un descenso importante del potasio, en caso de tomar alguna medicación especial que necesite un nivel adecuado de potasio, como sucede en algunos medicamentos para pacientes con dolencias cardíacas, estaríamos provocando una situación peligrosa. Es posible incrementar este nivel añadiendo productos ricos en potasio a nuestra alimentación, sin embargo sería necesario realizar análisis con frecuencia para no arriesgar demasiado.
Recordemos que todas estas precauciones son únicamente para el consumo interno, ingiriendo aloe vera, no para su aplicación sobre piel o cabello, por ejemplo.
Para comprender en qué casos aplicaríamos las contraindicaciones anteriores debemos comprender cómo actúa el aloe vera. El ingrediente que contiene que ofrece la mayoría de los riesgos es el látex, situado entre la corteza y el gel, pues contiene una sustancia llamada aloína.
El jugo por sí mismo no contiene este ingrediente, sin embargo, si no sabemos diferenciarlo correctamente resultaría igualmente peligroso pues podríamos mezclarlos. En caso de recurrir a productos procesados, hay algunos que extraen únicamente el jugo o gel, sin embargo otros mezclan toda la hoja, por lo que también contendría aloína. Para identificar estos casos, podemos comprobar los ingredientes que componen el producto. Por ejemplo, cuando se emplea contra el estreñimiento suele utilizarse una mezcla de ambas partes, pues es la aloína la que tiene efectos laxantes.
Sin duda, bien sea en el caso particular del aloe verao con cualquier otra planta con propiedades medicinales, deberíamos informarnos antes de todos los riesgos que puede implicar su consumo.
Silvia Pérez
Leí por ahí que también se usa como espermacida
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